CASTELLÓ. El alto precio del alquiler está dificultando la emancipación y el acceso a viviendas dignas de la población joven. La Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVHA) afirma que 400 unidades de convivencia de Castelló formadas por personas menores de 35 años están inscritas en el Registro de Vivienda de la Comunitat, es decir, tienen necesidad de un alquiler público por los precios prohibitivos del mercado privado.
El EVHA, dependiente de la Vicepresidencia Segunda y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, destaca que la juventud es uno de los colectivos más afectados por el problema de la vivienda y por ello debe "tener una respuesta inmediata desde las políticas de vivienda de la Generalitat, ampliando la oferta de vivienda, y en especial a aquellos jóvenes que están iniciando su vida laboral".
Así, explica que, según datos del Observatorio de Emancipación de España del segundo semestre de 2022, el coste del alquiler medio se disparó un 14 % en la Comunitat, situándose el esfuerzo económico de una persona joven para sufragar su importe en el 70,4 % de su salario. Además, añade que tener un trabajo "en la mayoría de los casos, tampoco es suficiente para acceder a una vivienda pues en general se produce un sobreendeudamiento que deja a los jóvenes en situación de pobreza o riesgo de exclusión".
Esta problemática sitúa en 400 los hogares integrados por menores de 35 años residentes en Castelló con necesidad de alquileres a precios económicos. Están inscritas en el Registro de Vivienda de la Comunitat, un instrumento creado en 2021 para reforzar la atención a las necesidades de vivienda. Para apuntarse al mismo, los ingresos de las unidades de convivencia no pueden exceder 4,5 veces el IPREM. Al respecto, desde el Consell subrayan que a estas situaciones "se les debe dar preferencia".
Por ello, la Generalitat muestra su voluntad de ayudar a la juventud y resalta que tanto las nuevas promociones públicas o las ampliaciones del patrimonio inmobiliario darán "máxima prioridad a la oferta para jóvenes con ingresos derivados del trabajo". El EVHA realiza esta explicación en una resolución publicada en el Diari Oficial que da cuenta del proceso de adjudicación excepcional de 10 viviendas en alquiler para menores de 35 años. Forman parte de un edificio autonómico situado en el Raval Universitari, con pisos de protección público en arrendamiento. Está integrado por 70 pisos, de los que 60 cuentan con inquilinos y 10 están sin uso. Estas 10 últimas están en fase de reparación.
Desde la Conselleria remarcan, además, que las viviendas que se puedan recuperar por distintas causas, como, por ejemplo, por renuncia o resolución por incumplimiento en este edificio, también quedarán reservadas al mismo colectivo.
Para poder a optar a una de las 10 viviendas, la unidad de convivencia, además de no superar los 35 años, ha de justificar ingresos iguales o superiores a 1,8 veces el IPREM que provengan de las rentas del trabajo.
Las viviendas adaptadas que puedan quedar desocupadas quedan reservadas complementariamente a unidades de convivencia que, además de cumplir con las condiciones anteriores, acrediten diversidad funcional en cualquier miembro de la unidad de convivencia.