CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Onda, tras su aprobación por la junta de gobierno, ha licitado el contrato para la construcción del carril bici que unirá el apeadero de Betxí, en la CV-10, con el casco urbano y su prolongación hasta la CV-223, a las puertas del parque natural de la Serrà Espadà.
Se trata de una inversión total de 563.240 euros que se divide en dos lotes: el tramo de carril bici en el casco urbano, completando la red cicloturista ya existente, y el tramo interurbano, que empalmará desde la ciudad hasta el carril bici que transcurre paralelo a la autovía, en el apeadero de Betxí. Tras estas actuaciones, cuyo plazo de ejecución se estima en tres meses, Onda contará con longitud total de 17 kilómetros de tramos de carril bici interconectados.
Este proyecto de movilidad urbana está cofinanciado al 50% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), en el marco del Programa Operativo Pluriregional de España. Las empresas interesadas tienen un plazo de 20 días naturales, a contar desde el siguiente de la publicación en el perfil de contratante del anuncio de licitación, para presentar sus propuestas a través de la Plataforma de Contratación del Sector Público.
Al respecto, la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester, ha señalado que este proyecto "posicionará Onda como ciudad saludable, paraíso ciclista y puerta de entrada a la Serra Espadà. Con estas actuaciones mejoramos la seguridad de los deportistas, la calidad de vida de los ondenses con opciones saludables y, a la vez, abrimos un abanico de oportunidades atraer turismo deportivo".
Dentro del casco urbano el gobierno municipal ha planteado una red de carriles bici compuesto por un total doce ejes diferentes, tres de los cuáles ya están ejecutados, sumando una longitud de 9.873 metros.
El primero de ellos prevé unir el carril bici previsto desde la carretera CV-20 con el carril bici de la carretera CV-223, y por tanto una puerta de conexión con la Serra d’Espadà. Asimismo, este tramo enlazará con la denominada Ruta del Riu Sonella, añadiendo otro atractivo a su uso. Su desarrollo partirá de la pedanía del Tossalet a través del denominado camino de Capamantos, atravesando todo el camino hasta derivar a la zona denominada Sur 11 (abanicos).
El segundo tramo comunicará el cementerio de la localidad con el carril bici periurbano en la entrada del barrio de la Morería. Su desarrollo permitirá conectar la localidad con el denominado Proyecto de Corredor Verde del Río Sonella.
Por otra parte, el siguiente tramo logrará la conexión del carril bici sur y norte de la localidad. Para ello se partirá del camino del Aguillador, se cruzará transversalmente la carretera CV-20 para ir a buscar la carretera CV-21 a través de la Avenida de l’Alcora. El objeto es la conexión del carril bici existente en la Avenida Serra d’Espadà con el existente en el camino del Aguillador, logrando obtener un circuito perimetral al casco urbano de Onda.
Dos tramos más conectarán la red viaria del casco urbano de Onda con el embalse del Sitjar. La conexión se realizará integrando en la calzada de las calles Francesc Ferrer Pastor y Sanchís Guarner.
Por último, se ejecutarán tres tramos más que permitirán llegar a todo el centro del casco urbano conectando espacios dotacionales mediante una infraestructura integrada en la calzada, de sentido unidireccional, que llegará a la Avenida del País Valencià, recorriendo 1.100 metros. La Avenida Montí y la Calle Perera se transformarán de nuevo en Zona 30 para albergar un carril ciclista unidireccional, conectando el vial que discurre paralelo al Río Sonella con el casco urbano, finalizando en la plaza del Raval.
Por otro lado, el segundo lote licitado comprende la construcción del eje interurbano que comunicará el carril bici que transcurre paralelo a la autovía CV-10, a la altura del apeadero de Betxí, con la red ciclista del casco urbano. La longitud total de este vial será de 7,2 kilómetros.
El carril bici se construirá por el único camino agrícola que existe y que en la actualidad carece de firme. Será un tramo rectilíneo de anchura de tres metros y en el que se deberán compatibilizar los usos de la bicicleta con los de mantenimiento de los campos agrícolas.