CASTELLÓ. En un emotivo acto, Onda ha rendido homenaje a sus mayores y a las personas dependientes en una celebración que ha marcado uno de los días más especiales del año. La alcaldesa, Carmina Ballester, ha liderado un esfuerzo excepcional para conmemorar la importancia de estos colectivos en la localidad.
Como parte de la Fira d'Onda, más de 1.300 personas mayores han disfrutado de un día repleto de actividades y muestras de afecto. La jornada ha iniciado con un festivo pasacalle que ha recorrido las calles de la ciudad, creando un ambiente alegre. Posteriormente, se ha llevado a cabo la tradicional comida, seguida de un animado baile en el recinto de fiestas. Los ondenses han mostrado su aprecio y gratitud hacia aquellos que han contribuido tanto al desarrollo de la localidad.
Durante la comida homenaje, la alcaldesa ha agradecido a los mayores por su contribución al municipio y ha querido destacar la importancia de este evento en el calendario de Onda. "Hoy, una vez más, queremos agradecer a quienes han sido un pilar fundamental en nuestra localidad. Gracias por haber construido la Onda que hoy conocemos", ha declarado. La primera edil también ha hecho hincapié en la idea de que Onda sigue creciendo y prosperando gracias a la dedicación de sus mayores y al apoyo a las personas dependientes.
La celebración no se detuvo con la comida homenaje, ya que, por la noche, más de 6.000 ondenses han acudido a recoger el tradicional tombet de bou. En esta ocasión, debido a la lluvia, no se ha podido realizar la cena en las calles del centro. No obstante, el Ayuntamiento ha habilitado un sistema de recogida para que los peñistas puedan disfrutar de la cena en los casales.
Los más pequeños también han tenido su espacio para la diversión en el día con juegos y actividades en un parque de aventuras en La Panderola, además del musical infantil La lámpara maravillosa, tributo a Aladdín.