CASTELLÓ. El entrenador del Castellón, Óscar Cano, ha tratado este viernes de moderar los ánimos que envuelven al conjunto orellut tras el buen arranque de temporada del equipo. En rueda de prensa, el técnico granadino ha subrayado la importancia de evitar que se hable de objetivos clasificatorios elevados después de situarse en puestos de promoción de ascenso y a solo un punto de la primera posición.
Cano ha recordado que la Liga no ha hecho más que empezar, que las distancias son mínimas tanto por arriba como por abajo y que cualquier discurso sobre play off o ascenso sería perjudicial para el equipo.
"Primero tenemos que conseguir los 45 o más puntos que nos aseguren la permanencia y después veremos si podemos optar a otros objetivos. Lo que hay que hacer es disfrutar del día a día y de lo que nos ofrecen los jugadores. Vamos a intentar que esas sensaciones buenas que tenemos nos den puntos y ya miraremos la clasificación más adelante", ha destacado el míster albinegro.
"Estamos en la jornada sexta y tenemos que ir con tranquilidad. No hay que ahogarse con objetivos que ahora mismo son inútiles y que lo único que representan es una carga. No hay que pensar en dónde vamos a llegar sin tener en cuenta el camino que hay que transitar y el próximo peldaño de esa escalera es el Nàstic", ha recalcado Cano.
Ese encuentro supone un reto de envergadura para el Castellón debido a la calidad de la plantilla tarraconense y a pesar de que la clasificación sitúa a los albinegros por encima. "Vamos a tratar de que su circulación de balón no tenga el ritmo adecuado y que la pelota no llegue a esos jugadores que la hacen determinante, con la dificultad que entraña hacerlo ante un rival que dispone de muchas variantes en su propuesta de juego", ha comentado el preparador albinegro.