VALÈNCIA. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible,, ha asegurado que unos de los objetivos de su departamento es convertir a Renfe en una Aena, la empresa pública española que se ha convertido en el primer gestor aeroportuario del mundo y que es la sexta mayor empresa del Ibex 35.
En un acto de Nueva Economía Fórum, el ministro ha calificado a Aena como un "orgullo del Ministerio", con un valor de 31.000 millones de euros y con operativa en 87 aeropuertos, muchos de ellos fuera de España. "Vamos a plantearnos el reto de hacer de Renfe una Aena en no mucho tiempo", ha señalado.
En los últimos años, el Gobierno ha ampliado la presencia internacional de Renfe, que ya va más allá del llamado 'AVE a la Meca', tras comprar participaciones en operadores checos e italianos, participar en proyectos ferroviarios mexicanos y estadounidenses y entrar en Francia.
Sobre este último país, donde Renfe esperaba llegar a París antes de los últimos Juegos Olímpicos del pasado verano, Puente ha trasladado que no cree que ni siquiera vaya a llegar este año, por las trabas de Francia a su entrada.
Renfe ya está preparando un documento jurídico para denunciar ante Bruselas esas trabas, mientras el ministro pide "corresponsabilidad, lealtad y reciprocidad" a Francia, después de que España ya haya abierto la competencia a operadores franceses e italianos, y que ha supuesto que la alta velocidad haya pasado de generar un beneficio de 115 millones de euros para Renfe antes de la liberalización a unas pérdidas conjuntas de 230 millones anuales para Renfe, Iryo y Ouigo.
Para dirigir esta nueva etapa de Renfe, Puente ha defendido que hace falta un gestor de transporte, lo que ha provocado la dimisión del actual presidente de Renfe, Raül Blanco, con efectos el próximo martes, cuando se prevé que se nombre al actual secretario general de Movilidad Sostenible, Álvaro Fernández Heredia, como nuevo presidente.
Puente ha rechazado confirmar el nombramiento, si bien ha defendido que es "el mejor experto en gestión de viajeros de este país", tras haber sido director gerente de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) --cuando Manuela Carmena era alcaldesa-- y de Autobuses Urbanos de Valladolid (Auvasa) entre 2019 y 2023, cuando Puente era alcalde de esa ciudad.
"Me sorprende que alguno haya analizado que Fernández Heredia es afín a mí, ya que no es militante ni siquiera del Partido Socialista. Desde luego la militancia no la compartimos", ha apuntado el ministro. El posible futuro presidente de Renfe fue concejal de Más Madrid en el Ayuntamiento de Madrid justo antes de su entrada en el Ministerio.
Puente ha aprovechado para rechazar que algunas incidencias, como la del pasado 1 de enero en los Talgo Avril, sean achacables al presidente de Renfe, ya que esa en concreto estaba relacionada con un error de software de ese modelo de trenes al cambiar de año.
Precisamente sobre Talgo ha hecho una reflexión sobre las operaciones de compra del fabricante de trenes, diciendo que "a nadie se le ocurriría ir a Francia e intentar comprar Alstom desde fuera sin contar con el Gobierno francés".
Sobre el interés del grupo vasco Sidenor de entrar en Talgo, el ministro ha defendido que cumpliría con los dos objetivos del Gobierno: mantener su españolidad y garantizar su capacidad industrial. "Es el candidato que encaja con la filosofía del Gobierno, pero entendemos que los accionistas tienen el legítimo derecho de realizar o no sus acciones y de obtener el mayor beneficio por ellas", ha añadido.
Puente también ha dado a conocer la cifra de inversión ejecutada en 2024 en su Ministerio, que asciende a 10.000 millones de euros, un 17% más que en 2023 y la cifra más alta desde 2011, duplicando las de 2016 y 2017. El ferrocarril concentró 5.629 millones, 2,5 veces más que en 2017, copando la red convencional unos 2.330 millones de euros, 10 veces más que en 2014.
En este sentido, el ministro ha avanzado que el segundo semestre de 2025 será un año de transición en lo que a bonificaciones al ferrocarril se refiere, con el objetivo de implementar en 2026 un billete único para todo el transporte, aunque sin dar más detalles al respecto.
También se ha referido a la ampliación del Puerto de Valencia como una "infraestructura clave para España" o como "la obra portuaria más importante que se está haciendo en la Unión Europea", al concentrar en torno a 750 millones de euros de inversión pública y más de 1.600 millones de privada.
"Va a permitir que Valencia tenga una conexión ferroviaria de todas las terminales del puerto en el mismo costado de cada terminal. Y, por tanto, nos va a permitir bajar 1.000 camiones día de la carretera", ha señalado.
Además, desde el punto de vista medioambiental, ha dicho que es una operación "muy positiva", más allá de la polémica en torno a las playas del sur de Valencia, que asegura no las daña esta terminal, porque el muelle de contorno ya estaba construido. "Este daño se produjo en los años 80 con la construcción de la primera terminal de Poniente y la terminal sur", ha concluido.