PEÑÍSCOLA. La concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Peñíscola está trabajando hace varias semanas en la tramitación de la adhesión al Circuit Cultural Valencià tras manifestar por escrito al Institut Valencià de Cultura su voluntad de formar parte de él. El objetivo de la adhesión es programar actividades culturales y actuaciones en el Palau de Congressos, edificio de titularidad autonómica, cuya programación ha gestionado hasta ahora la Generalitat.
Desde el consistorio se ha afeado reiteradamente al Institut Valencià de Cultura la falta de programación que, desde hace varios años, se ha reducido a las actuaciones del Festival de Jazz, en el mes de julio, y varios conciertos del Festival de Música Antigua y Barroca, en el mes de agosto.
El cierre del Palau durante más de 10 meses al año ha motivado que desde la concejalía se haya consignado presupuesto municipal para hacer frente a la reapertura de esta instalación al público.
El edil del área, Ramón Simó, ha avanzado en los trámites solicitando múltiples informaciones al IVC ya que el primer requisito para entrar a formar parte del Circuit es contar con un espacio municipal donde realizar la programación.
"Necesitamos conocer cuál es el estado del Palau y con qué equipación y personal técnico cuenta para el desarrollo de la programación cultural que nos proponemos poner en marcha, siendo esta la única posibilidad de que recuperemos las actuaciones en este espacio emblemático", ha explicado el concejal, recordando que el edificio es propiedad de la Generalitat y no del Ayuntamiento, que cedió los terrenos donde está construido a cambio de que la administración autonómica lo dotase de actividad.
"Hemos insistido hasta la saciedad en reclamar que Generalitat cumpla con sus obligaciones en materia de programación y mantenimiento en el Palau de Congressos de Peñíscola, pero tras seis años largos del gobierno del Botànic seguimos con sus puertas cerradas y sin programación más allá de unas 5 o 6 semanas al año", ha explicado Simó, afeando al IVC su "falta de compromiso con la comarca".
Hace dos semanas, en un encuentro telemático con la dirección del IVC, el propio Simó trasladó una batería de consultas para poder avanzar en la tramitación de la adhesión al Circuit y preparar así la petición formal para su debate en el pleno municipal. Entre las solicitudes se encontraba la petición de una auditoría del mantenimiento del Palau que, tras el registro de otras peticiones, a principios de esta semana ha formalizado la concejalía a través de su registro en el IVC.
"Tras celebrar conciertos sin luz, sortear goteras, soportar olor a humedad e identificar butacas llenas de moho, exigimos conocer el estado del Palau de Congresos para poder abrir sus puertas y programar la cultura que la Generalitat nos niega", ha afirmado Simó, requiriendo información detallada del Palau, para conocer las condiciones en las que el IVC cederá puntualmente la instalación para la programación cultural al Ayuntamiento.
En el mismo escrito registrado esta semana en el IVC, la concejalía de Cultura ha solicitado las actas de los consejos celebrados por parte del Institut Valencià de Cultura "en los que se han tomado las decisiones de programar actividad cultural en las capitales de provincia exclusivamente a lo largo de todo el año, excluyendo espacios de su propiedad, como el Palau de Congressos de Peñíscola en el que están activando su agenda apenas unas semanas en verano", ha explicado el concejal, muy molesto por esta nueva política de programación, "que excluye a las comarcas y discrimina claramente a los vecinos y vecinas que están más alejados de las capitales, con el agravante de que disponen espacios donde poder programar, como el Palau en Peñíscola, que han decidido mantener cerrado", ha valorado.
Con este ya son tres registros solicitando información y documentación para poder avanzar en la tramitación de la adhesión del Ayuntamiento de Peñíscola al Circuit Cultural Valencià, "información que confiamos no se demore, para poder formalizar la adhesión al Circuit cuanto antes y reabrir las puertas del Palau a la ciudadanía y a la cultura; esta es la única opción que nos queda, pagar nosotros por lo que la Generalitat no quiere asumir", ha manifestado.