Los dos ediles de Podem-EUPV, María Jesús Garrido y Fernando Navarro, en una imagen de archivo. Fotos: Antonio PradasCASTELLÓ. Podem-EUPV somete a consulta popular su primer año de gestión en el marco del Acord de Fadrell. La confluencia impele una encuesta en su página web para conocer la opinión de la militancia. El sondeo, activado desde el pasado 9 de octubre, contiene 26 preguntas y se estructura por competencias, de acuerdo con las delegaciones asumidas por sus dos concejales dentro del reparto establecido con el PSPV y Compromís, los otros dos socios, para gobernar en el Ayuntamiento de Castelló.
Aunque la mayoría de las interpelaciones fiscalizan la labor de los ediles Fernando Navarro y María Jesús Garrido, también se pide una valoración sobre la respuesta del tripartito ante la covid-19 y qué políticas debe privilegiar en lo que resta de legislatura. Como el objetivo radica en evaluar la acción de gobierno de los mentados regidores, el enunciado de algunas cuestiones son coincidentes, así como la fórmula escogida para determinar el grado de satisfacción; alto, medio y bajo o muy malo, malo, regular, bueno y muy bueno.
También hay otras preguntas que solo ofrecen tres posibilidades, según si se trata de una respuesta afirmativa, negativa o no sabe, no contesta. En concreto, son aquellas planteadas de manera directa. Por ejemplo, ¿considera que Podem-EUPV ha tenido impacto sobre el Fadrell? El ejercicio de transparencia, como así defienden desde la confluencia, no solo busca examinar el trabajo de los munícipes. Igualmente persigue analizar la eficacia de los canales de comunicación a la hora de informar a las bases acerca de las distintas actuaciones.
En este contexto, se considera esencial averiguar hasta qué punto los afiliados están al día de los proyectos que son bandera programática de la convergencia en el consistorio. Por este motivo, se pregunta sobre el Parque Agrario, la Ruta del Agua o el Plan Estratégico de Vivienda.
El sondeo, que en realidad está abierto al público pese a ir dirigido a la militancia, forma parte de un amplio proceso de reestructuración organizativo y que afecta especialmente al partido morado. Así, los afiliados van a tener que elegir la nueva dirección de Castelló en los próximos meses con la celebración de la III Asamblea Ciudadana Municipal. De hecho, la formación que lidera Navarro ya está metida de lleno en ese trámite interno con la activación de lo que denomina círculos, a partir de los cuales se constituyen equipos dinamizadores que, a su vez, han de definir la portavocía y el Consejo de Coordinación.
En efecto, los militantes de Podem están convocados a las urnas para renovar su confianza en Navarro como secretario general (portavoz con el nuevo modelo orgánico) o, por el contrario, elegir a otro u otra referente local. En vista de que el proceso todavía permanece en estado embrionario, por el momento nadie ha dado un paso al frente para postularse como posible candidata o candidato.
El líder morado sustituyó a César Jiménez al frente de la formación en abril de 2018. Lo hizo entonces como único aspirante y encabezando la lista de Movem Castelló, apelativo que se interpretó como un guiño a Castelló en Moviment (CSenM), plataforma asamblearia que desarrolló su actividad en el Ayuntamiento como una extensión de Podem hasta los comicios municipales de 2019.
Cabe advertir que la agrupación local cuenta en la actualidad con 359 militantes, los que están al corriente del pago de las cuotas y que verdaderamente participan en la toma de decisiones. A ellos hay que suman otras dos figuras de colaboradores: los inscritos (2.353) y los activos telemáticamente (759).
