VILA-REAL. El Submarino amarillo no ha empezado la pretemporada de la mejor manera. Arrancó con una dolorosa derrota por 6-1 ante el St Gallen suizo, y aunque se recuperó ganando 0-3 al Rheindorf Altach austríaco, los fantasmas volvieron a hacer acto de presencia el pasado sábado con el 3-0 encajado frente al Hannover 96. Ahora bien, estos tres rivales tienen algo en común: un nivel notablemente inferior al de los siguientes adversarios del Villarreal.
La dificultad de los próximos encuentros de los groguets es considerablemente superior a la de los primeros duelos. Pasarán de jugar contra equipos de Suiza, Austria y Segunda División alemana, a enfrentarse a campeones de ligas europeas o equipos clasificados para la Champions League.
Sin ir más lejos, este jueves a las 19:00 el cuadro que dirige Quique Setién visitará al actual campeón de la Eredivise, el Feyenoord. Además, el conjunto de Países Bajos llega bastante rodado después de haber jugado ya cuatro amistosos y con la Supercopa de Países Bajos a la vuelta de la esquina.
Sólo tres días más tarde, el domingo a las 21:00, llega otra cita muy complicada, en este caso en el estadio José Alvalade de Lisboa. En la capital lusa el Villarreal se enfrentará al Sporting CP, cuarto clasificado en la última liga portuguesa y campeón hace tres temporadas. Otra piedra complicada en el camino.
Tras esa semana de enfrentamientos exigentes, los de La Plana gozarán de seis días sin partidos para poder dedicarse al 100 % a entrenar antes del torneo amistoso que disputarán en Newcastle, al norte de Inglaterra. Allí se medirán al Niza el sábado 5 de agosto a las 13:30, y sólo un día más tarde jugarán contra el propio Newcastle a las 17:00.
Mientras que el Niza es un equipo instalado en la zona media-alta de la liga francesa, el Newcastle constituye un hueso mucho más duro de roer. Los magpies (urracas en inglés) fueron comprados por Arabia Saudí a finales de 2021 y desde entonces no han dejado de mejorar como equipo. En la última Premier League quedaron cuartos, logrando regresar a la Champions dos décadas después.
Así pues, parece evidente que el Villarreal debe mejorar su rendimiento si quiere competir contra estos equipos europeos de alto nivel, algo necesario para llegar con una buena dinámica al inicio de liga ante el Betis. Para ello, además de aclarar conceptos tácticos y aumentar el tono físico, todo apunta a que el conjunto presidido por Fernando Roig deberá acudir al mercado con los millones que ha ingresado para reforzar varias posiciones.