CASTELLÓ (EFE). El president de la Generalitat, Ximo Puig, asistirá este lunes al Salón Internacional del Calzado de Milán (MICAM), donde se exponen las tendencias de la colección otoño-invierno 2023-24, con el objetivo de dar su apoyo al sector en la eliminación y rebaja de aranceles que facilite la entrada a nuevos mercados.
El certamen es el líder a nivel mundial y constituye un evento de referencia, especialmente para las empresas zapateras de la Comunitat Valenciana, la principal región productora de España que acapara en Milán casi la mitad de los cien expositores españoles, la inmensa mayoría de firmas de Elche.
“Desde el Consell estamos impulsando y apoyando los acuerdos de la Unión Europea con nuevos espacios comerciales de manera que nuestro calzado pueda entrar en ellos en las mejores condiciones, sin aranceles o, en caso de existir, reducidos al mínimo para que la competitividad esté basada solo en el nivel de calidad y de innovación, algo que caracteriza al producto fabricado en la Comunitat Valenciana”, según el secretario autonómico para la UE y Relaciones Externas, Joan Calabuig.
“El sector del calzado está haciendo un esfuerzo por consolidar mercados de alto poder adquisitivo como Canadá, Japón, Australia o Estados Unidos, lugares donde se exige una gran excelencia del producto”, ha indicado Calabuig.
El Salón del Calzado de Milán, líder del sector a nivel mundial, constituye un evento de referencia para distribuidores de todo el mundo y especialmente para las empresas de calzado valencianas. Así, casi la mitad de los expositores nacionales presentes en la feria (48 de 100) procede de la Comunitat Valenciana, principalmente de la provincia de Alicante, con 43 expositores.
La industria del calzado de la Comunitat Valenciana “es un sector muy abierto al exterior, que se mueve y piensa en términos globales" y cuya "apuesta por la internacionalización le ha permitido superar las crisis económicas y el reto de competir en un entorno de comercio globalizado sometido a una fuerte competencia”.
“Las principales razones del éxito de esta industria valenciana son su apuesta por el diseño, la calidad, la innovación y sostenibilidad, mientras que sus retos de futuro se dirigen hacia la ecoinnovación y la economía circular y hacia la digitalización, que se tiene que aplicar no solo a la innovación, sino a todos los procesos del calzado”, ha señalado Calabuig.
La apuesta por la ecoinnovación supone el desarrollo de la economía circular en el sector del calzado, que incorpore el reciclaje de tejidos y nuevos materiales en el horizonte futuro de residuo cero.
La sostenibilidad y la economía circular “se han convertido en un factor esencial de competitividad y en una necesidad derivada de la vulnerabilidad de la cadena de suministros y las tensiones en la coyuntura de precios”, ha afirmado el secretario autonómico, para quien “son retos importantes a los que la Generalitat está dando su apoyo, no solo con los centros de investigación e innovación, como la Agencia Valencia de Innovación o Inescoop, sino también con la apertura a nuevos mercados en una oportunidad tan importante como es la Feria de Milán”.
La feria, que se celebra dos veces al año, siempre antes del comienzo de la temporada de verano e invierno, constituye una gran oportunidad para que las empresas conozcan de primera mano cuáles son las tendencias y estrategias que influirán en la comercialización del calzado en los próximos meses.
El calzado constituye una de las principales industrias de la comarca del Vinalopó, con el núcleo duro en Elche, donde también se sitúan numerosas industrias auxiliares de componentes.
En la Comunitat Valenciana se localizan el 66 por ciento de las empresas activas fabricantes de cuero y calzado del conjunto del país, lo que supone unas 2.000 empresas respecto a las 3.000 que tiene España.
La industria de cuero y calzado de la Comunitat Valenciana genera un valor de más de 1.000 millones de euros anuales. El calzado de piel es el producto más exportado y Alemania, Francia, Estados Unidos e Italia son los principales destinos de las ventas valencianas al exterior.