CASTELLÓ. Restaurar el laboratorio desde donde se restauran todas las obras de arte de la provincia de Castelló. La Diputación de Castellón ha adjudicado un contrato para proceder a la reforma del antiguo edificio de Penyeta Roja, en concreto la cuarta planta, que es donde se ubica ests servicio que se puso en marcha en 2003.
Se trata de un edificio con más de 40 años y en esta parte había goteras, lo que podía dañar las piezas, la mayoría históricas, que se almacenan en las instalaciones para su restauración.
De esta forma, tal y como explican fuentes de la institución provincial, "el equipo de gobierno ha considerado que era necesario actuar en las bóvedas ya que desde su puesta en marcha nunca se había reparado nada". Este servicio, que formalmente se puso en marcha en 2003 cuanto con varios prestigiosos profesionales que disponen de esta especie de quirófano para el arte de la provincia.
De hecho, fue en 2003 cuando se incrementó de manera notable el equipamiento del servicio y se profesionalizó. Ahora, con estas obras a punto de adjudicarse y con un plazo de cinco meses se creará un pequeño problema ya que los restauradores serán trasladados a la primera planta,donde todavía no hay nada habilitado pero que podría retrasar varios de los proyectos de recuperación patrimonial.
En este servicio se recuperan pinturas de gran lienzo, esculturas, elementos gráficos, piezas únicas como azulejos históricos, arqueología e incluso arte contemporáneo, dispone de varias referencias por sus grandes trabajos y ofrece servicio a los 135 municipios de la provincia de Castellón.
Sin ir más lejos, este año hay proyectos tan emblemáticos como esculturas de la Semana Santa de Vila-real, el Cristo de la Piedad de Sot de Ferrer... Este departamento, gestionado por la diputada Ruth Sanz, es una apuesta constante por mantener viva la llama del patrimonio provincial. Además, este servicio cuenta con el convenio de algunas instituciones, comoel obispado de Tortosa y el de Segorbe-Castellón que suponen 60.000 euros al año, por ejemplo.
La importancia del servicio radica en la recuperación paulatina del arte sacro, como ha ocurrido en grandes reclamos turísticos como son la Llum de la Memoria y que presta ayuda a pequeños municipios en los que, a no ser por este tipo de ayudas, se perdería este patrimonio provincial.