BENICARLÓ. Román Sánchez ha presentado su dimisión como edil del PSPV en el Ayuntamiento de Benicarló. Así lo ha anunciado en su perfil de Facebook, en el que ha arremetido contra la alcaldesa, Xaro Miralles. Su renuncia provoca que se corra la lista en el Partido Socialista para que la independiente Alicia Fuster, número 12, asuma el acta de concejala.
Sánchez, protagonista de una crisis en el grupo municipal durante el pasado mes de enero, ha asegurado que se marcha porque "en estos momentos no tengo ni el apoyo de la Alcaldía, que no me habla [Miralles], ni la ilusión por iniciar un nuevo proyecto. Tampoco las competencias ni el equipo técnico necesario. Entre los compañeros unos tienen miedo de hablarme por temor a las consecuencias. Otros no lo tienen y las padecen".
El exregidor ha publicado en su muro que "la legislatura parece forzada desde el principio a la promoción de una única persona, cuyos intereses quedan más allá del Ayuntamiento de Benicarló. Destacar, hacer bien tu trabajo te convertía en sospechoso. Nada puede funcionar si no se acepta la discrepancia".
En este punto, Sánchez ha afirmado que "el Partido Socialista de Benicarló, en el que he estado trabajando durante 20 años, ha desaparecido para dar paso a la agrupación de electores de Xaro Miralles. Un instrumento más a su servicio". Como consecuencia, el exconcejal ha subrayado que "las concejalías no se comunican y están intentando salvar los muebles de cara al final de legislatura. Las pocas decisiones que se toman se hacen sin conocimiento del grupo y sin mayor análisis que una rabieta, generando nuevos problemas, algunos de consecuencias catastróficas".
El exedil, tras haber perdido la cartera de Urbanismo en enero, ostentaba en la actualidad las competencias de Promoción Económica y Desarrollo Local. El PSPV, con 11 munícipes, gobierna en solitario en el Ayuntamiento de Benicarló, donde la oposición (PP, Ciudadanos y Compromís) suma 10 representantes.