CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló y la Generalitat Valenciana ya tienen activada la cuenta atrás para cerrar el anillo de circunvalación con la ejecución de la segunda fase de la ronda Oeste. Dentro del farragoso trámite administrativo del complejo expediente, los plazos siguen avanzando para que las obras arranquen en 2025.
En paralelo con el proceso de expropiación del primer tramo, entre el enlace con la CV-151 y CV-16 (1,45 km), que actualmente está en exposición pública, se trabaja para reajustar los distintos proyectos asociados a la construcción del vial. La adjudicataria de elaborar estos documentos, la Unión Temporal de Empresas (UTE) Oficina Técnica TES-Car Enginyeria Civil, lleva desde agosto realizando las correspondientes modificaciones de acuerdo con el nuevo planteamiento de materializar la carretera en dos trozos (con el Botànic y el Fadrell se estableció en uno solo).
Según los tiempos marcados, la UTE entregará el proyecto constructivo del primer tramo (el del vial y el de la zona verde) antes del 16 de noviembre. Esto supondrá un punto de inflexión en las obras, ya que la Conselleria de Infraestructuras ya estará en disposición de licitar el contrato.
A partir de ese momento, las demás fases se desarrollarán de manera progresiva y siempre con arreglo a un cronograma que permitirá compaginar distintos procesos. Por ejemplo, la ejecución de ese primer intervalo coincidirá en el tiempo con el procedimiento de expropiación del segundo.
Todos los proyectos relativos a la culminación de la ronda Oeste deberán estar listos antes del 15 de julio de 2025. Así se recoge en el documento firmado entre la citada UTE y el Ayuntamiento el pasado 14 de agosto, cuando se rubricó la modificación del expediente del servicio de consultoría para la redacción del estudio informativo y de los proyectos básicos y de ejecución.
La finalización del anillo periférico de Castelló se realizará en dos fases. La primera implicará ese ramal entre la CV-151 (rotonda de La Silla en la UJI) y CV-16. La segunda (0,9 km) comprenderá el intervalo desde la carretera de Alcora (CV-16) hasta la ronda Sur, esto es, la amplia glorieta de entrada que conecta con la N-340, la AP-7 y la CV-17.
Toda la obra civil representará una inversión de 46.486.349 euros. La Generalitat asumirá el coste de construcción del vial y las zonas verdes, mientras que el Ayuntamiento se ocupará de las expropiaciones. Para la adquisición de las parcelas afectadas, se destinarán 9.166.349 euros.
Al respecto, solo en el primer tramo será preciso comprar terrenos de 55 parcelas de más de 90 propietarios, que ocupan una superficie de 73.212,39 metros cuadrados. La mayoría de estos solares son rústicos y de cultivos. Sin embargo, existen 19 viviendas construidas entre los años 40 (la mitad de ellas) y el resto entre los años 60, 70 y 80 con reformas parciales o integrales realizadas en los años 90 (también hay rehabilitaciones de 2018 y de 2020). Esto obligará a realizar 9 desalojos.