CASTELLÓ. El Castellón va a viajar a Mérida sin dos de sus piezas de retaguardia debido a las lesiones. Y es que, a la ya conocida baja de Salva Ruiz, que se pierde su cuarto partido consecutivo, se suma la de Borja Granero, que también se recupera de una dolencia física.
Esta circunstancia reducirá las opciones de Dick Schreuder para esa posición. Así las cosas, el técnico neerlandés dispondrá de cuatro jugadores para tres puestos en la retaguardia.
En el encuentro frente al Ceuta, el entrenador del Castellón utilizó a Jozhua Vertrouwd, pero Schreuder ha reconocido que la apuesta fue fallida. “Le elegimos a él en el último partido y está claro que las cosas podían haber salido mejor, pero también tiene que ver con el equipo”, ha expresado el técnico, que ha añadido que el joven futbolista “es un talento que necesita mejorar para jugar partidos”.
Con estas pistas, parece claro que el de Ámsterdam no integrará el once inicial frente al Mérida, por lo que la línea de tres quedaría formada por Daijiro Chirino, Alberto Jiménez y Óscar Gil, a no ser que Schreuder retrase a uno de los centrocampistas a la posición de central. Iago Indias es defensa natural, pero el técnico ya ha dicho que, dentro de su idea de juego, encaja mejor como mediocentro.
La buena noticia es que la recuperación de Salva Ruiz va por buen camino. Schreuder espera que pueda entrar en la siguiente convocatoria, frente al Atlético Baleares. No jugaría de inicio ese encuentro, pero dejaría atrás una lesión que ha mermado el nivel defensivo de los albinegros en las últimas jornadas.