VALÈNCIA (EP). El recién elegido 133 presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, ha conseguido este jueves el apoyo necesario para liderar el Govern que comporta la vuelta del PSC a la Generalitat tras 14 años de independentismo, y en una sesión plenaria marcada por el regreso del expresidente Carles Puigdemont.
Nacido en La Roca del Vallès (Barcelona) el 5 de mayo de 1966, donde fue alcalde de 1995 a 2005, ha alcanzado la Presidencia con el apoyo de ERC y los Comuns después de ganar las elecciones catalanas el 12 de mayo.
La pasada legislatura, en la que el ya expresidente Pere Aragonès ha liderado el Ejecutivo (primero en coalición con Junts y después en solitario), Illa ejerció la oposición reivindicando la política útil.
El líder socialista ha dado la llave de la Generalitat al PSC por primera vez desde el año 2010, cuando José Montilla, que lideraba el Govern del segundo tripartito, pasó de los 37 escaños en 2006 a los 28 en 2010.
En 2012, liderados por Pere Navarro con una estrategia basada en el federalismo como solución a un conflicto que comenzaba con una apertura de la Convergència de Artur Mas a un proyecto abiertamente independentista, el PSC descendió a 20 escaños y pasó a ser tercera fuerza.
La trayectoria política de Illa comenzó en 1995 como alcalde de La Roca del Vallès, cargo en el que estuvo hasta 2005, cuando asumió la dirección general de Gestión de Infraestructuras de la Conselleria de Justícia de la Generalitat.
Entre 2010 y 2011 dirigió la Gestión Económica del Ayuntamiento de Barcelona; hasta 2016 coordinó el grupo municipal y, de 2014 a 2016, fue jefe de gabinete del actual alcalde, Jaume Collboni.
Fue nombrado ministro de Sanidad del Gobierno de Pedro Sánchez en enero de 2020, un mes antes de la pandemia, y tuvo que gestionar la crisis sanitaria asumiendo la gestión del primer estado de alarma y de la compra de vacunas hasta enero de 2021, cuando dejó su cargo para presentarse a las elecciones catalanas.
Illa es el primer secretario del PSC desde 2021 pero, todavía como secretario de Organización, en diciembre de 2020, fue proclamado candidato a la Presidencia de la Generalitat para las elecciones del 14 de febrero de 2021.
El líder socialista ganó las pasadas elecciones catalanas, en las que el PSC venció por primera vez tanto en votos (870.224) como en escaños (42, 9 más que en 2021).
En los comicios de 2021, Illa ganó con más de 650.000 votos, casi el doble de los que consiguió el PSC en 2017, cuando fue cuarta fuerza en la Cámara, pero empató a 33 escaños con la candidatura republicana de Aragonès, que finalmente logró los apoyos para ser investido con los votos de ERC, Junts y la CUP, que dejaron a Illa en la oposición.
Es precisamente desde la oposición donde ha reivindicado haber ejercido una política constructiva: tanto en 2023 como en 2024 apoyó los Presupuestos de ERC, aunque estos últimos no salieron adelante por el 'no' de los Comuns, que finalmente desencadenó la convocatoria anticipada de elecciones.
La victoria de Illa el 12 de mayo revalidó su posición como fuerza más votada en el Parlament y deshizo la mayoría independentista que había en la Cámara : ERC pasó de 33 diputados a 20 y la CUP de 9 a 4, mientras que Junts pasó de 32 a 35 y Aliança Catalana entró con 2 escaños.
Durante la campaña electoral, Illa dijo que veía como fórmulas posibles tanto una coalición como un gobierno en minoría, como finalmente sucederá, gracias a los acuerdos de investidura con ERC y los Comuns que le han dado los 68 diputados necesarios para ser investido.
"Hay varias fórmulas una vez hayan hablado los catalanes. La clave es que haya estabilidad en el próximo Govern", dijo en la campaña, durante la cual afirmó su voluntad de conformar el Ejecutivo catalán con personas -textualmente- muy cualificadas en cada una de las materias con independencia de su militancia en algún determinado partido.
En su discurso en la sesión de investidura, Illa ha dejado claro que los acuerdos con ERC y los Comuns son de investidura y no de legislatura, aunque ha afirmado que los dos partidos serán sus socios preferentes, aunque también se ha abierto a hablar con Junts, PP y la CUP para alcanzar acuerdos mientras que ha descartado hacerlo con Vox y Aliança Catalana.
Durante su discurso, también ha reclamado la aplicación "ágil, rápida y sin subterfugios" de la Ley de Amnistía y ha pedido el restablecimiento íntegro de la totalidad de los derechos políticos de todos los ciudadanos de Catalunya.
Illa ha explicado que su Govern se basará en dos grandes principios, el primero de los cuales será "unir la Catalunya de los 8 millones de personas" y ha instado a abrir una etapa de consensos.
Del nuevo Ejecutivo se conocen dos nombres que Illa citó en la campaña electoral: recuperará la figura del excomisario jefe de los Mossos d'Esquadra Josep Lluís Trapero como director general de la policía catalana, y asignará la conselleria de Interior a la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) y portavoz del PSC, Núria Parlon.
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