VALÈNCIA (EP). Personal sanitario se ha vuelto a concentrar este martes, esta vez frente a la Conselleria de Sanidad, contra los "recortes" que está aplicando el conseller Marciano Gómez y para pedir al president de la Generalitat, Carlos Mazón, que se implique en la gestión sanitaria y no permita que "se menoscaben" sus derechos laborales.
Así, convocados por CCOO PV, UGT-PV e Intersindical Salut, han protestado tras una pancarta unitaria: 'No a los recortes en Sanidad. No a la movilización forzosa. Por las 35 horas. Por unas condiciones laborales justas'. Los sanitarios ya salieron a las puertas de sus hospitales y centros de salud el pasado martes y la semana que viene volverán a hacerlo, mientras que el 14 de mayo se unirán en una concentración ante el Palau de la Generalitat.
Al respecto, la secretaria de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO PV, Rosa Atiénzar, ha señalado que con estas protestas quieren mostrar "el malestar y el rechazo a todas las políticas de recorte y de endurecimiento de las condiciones laborales que está implementando la Conselleria de Sanidad desde que llegaron al poder".
Así, ha advertido de que "todas y cada una" de las políticas que está aplicando Sanidad "tienen un recorte presupuestario y un endurecimiento en los derechos laborales", lo que "va a perjudicar tanto a la ciudadanía como a los profesionales".
De este modo, ha criticado que con estas medidas en lugar de "retener y atraer el talento", la Comunitat Valenciana será "mucho menos atractiva" para los sanitarios, lo que "favorecerá la fuga de profesionales no solo a otras comunidades autónomas, sino también a otros sectores y al sector privado".
Una de estas medidas de "recorte" es la implantación del nuevo sistema de módulos de refuerzo, con "una disminución del presupuesto en 3 millones, una reducción del tiempo de asistencia a la ciudadanía y consecuencias como el aumento de las listas de espera".
Del mismo modo, los sindicatos convocantes se oponen al decreto que regula la bolsa para los grupos A1 y A2, que "abre la puerta a la arbitrariedad y la contratación a dedo"; y el decreto sobre macroáreas, que "instaura la movilidad forzosa del personal sin garantizar la cobertura de la atención en el centro de origen, ni la continuidad de los cuidados en las zonas de difícil cobertura" y "tampoco se ha reforzado la plantilla". De hecho, la Conselleria "no ha cumplido con las casi 1000 plazas del incremento de personal previsto para 2023".
En ese sentido, Atiénzar ha señalado que a nivel presupuestario "el decreto de las macroáreas, según la memoria económica, tiene un ahorro económico de cerca de 1,9 millones, pero el incremento de plantilla que no se ha ejecutado en función de las categorías profesionales se puede cuantificar por encima de los 30 millones".
Otro "agravio", señalan, es "la tramposa negociación" sobre las 35 horas porque la Conselleria de Sanitat "pretende implementarla a cambio de incrementar la jornada real". "Estas medidas implantadas por el Gobierno valenciano recortan derechos y condiciones laborales, favorecen la fuga de los profesionales, aumentan listas de espera y provocan un mayor deterioro en la sanidad valenciana", recalcan los sindicatos.
Ante esta concentración, el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha asegurado que el PP "lo único que recorta son las listas de espera". Así se ha pronunciado el titular de Sanidad ante los medios tras presentar el plan funcional del nuevo Hospital General de Castellón.
"Hoy es un día para no hablar de otra cosa que no sea del nuevo hospital, pues nos encontramos ante un día absolutamente histórico, con un compromiso con la sanidad pública valenciana centralizada en Castellón", ha dicho.
Respecto a si piensa reunirse con los sindicatos, Gómez ha señalado que la Conselleria "se está sentando todos los días con ellos", pues hay meses abiertas con ellos y se está negociando con ellos.
"No hemos hecho ningún recorte ni ningún tipo de movilidad, lo que pasa es que estos sindicatos que hoy se están movilizando se levantaron de la mesa y no acordaron lo que acordaron los que se quedaron, que fue que la movilidad del personal que actualmente tiene su plaza va a ser intocable, a no ser que haya cualquier tipo de incidente en cualquier tipo de gravedad que tengamos que ejecutar cualquier tipo de situación excepcional", ha subrayado el conseller.
"Si no se hubieran levantado de la mesa, seguramente hubieran sabido este acuerdo y nosotros tenemos las puertas abiertas para todo el que quiera hablar con nosotros, y de hecho tenemos mesas técnicas para esto", ha concluido.