LONDRES (EFE). La castellonense Sara Sorribes consiguió este miércoles una trabajada victoria ante la croata Ana Konjuh, por 6-3, 3-6 y 6-3, en dos horas y 15 minutos de juego, y avanzó a segunda ronda de Wimbledon, donde se enfrentará a la alemana Angelique Kerber.
De esta forma, Sorribes iguala su mejor prestación en la hierba londinense, que se remonta a 2018, cuando también alcanzó la segunda ronda pero cedió en ella ante su compatriota Carla Suárez.
En la primera vez que la jugadora de Castellón se enfrentaba a la croata, número 129 del mundo, Sorribes dominó el partido desde el comienzo y ofreció una imagen de solidez que, sin embargo, se vio truncada en el segundo set, cuando su rival comenzó a conectar buenos golpes desde el fondo y se adjudicó la manga.
Pese a todo, la española se sentía superior y no le importó madurar los puntos desde el fondo de la pista con una revés cortado efectivo y profundo, a la espera de que Konjuh fallase en el intercambio.
Finalmente se impuso la diferencia de calidad entre ambas jugadoras y a Sorribes le espera en la próxima ronda un duelo a priori mucho más complicado, contra la campeona de Wimbledon en 2018, quien está lejos ahora de su mejor forma.
El murciano, bordando el tenis y sabiendo sufrir como un titán al final, se corona en Londres con un nuevo triunfo frente al serbio, al que supera por 6-2, 6-2 y 7-6 (4) en 2 horas y 27 minutos para, a sus 21 años, ganar su cuarto Grand Slam, segundo de la temporada