CASTELLÓ. Más de 100 agricultores y ganaderos de La Unió Llauradora i Ramadera y 10 tractores, junto con el resto de organizaciones territoriales de la Unión de Uniones, han participado este miércoles en una manifestación a las puertas del Ministerio de Agricultura ante la falta de respuesta para el sector agrario sumido en una grave crisis agudizada además por el encarecimiento de los costes de producción.
La manifestación ha consistido en una marcha formada por distintas columnas de tractores que han salido desde diversos puntos de las comunidades autónomas de la Comunitat Valenciana, Castilla y León, Cataluña, Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid y que han desembocado en una protesta que ha llegado desde la Puerta de Alcalá hasta la sede del Ministerio de Agricultura, para reclamar medidas contundentes y una defensa real del campo.
La protesta pretendía, entre otras cosas, reivindicar propuestas que palíen de verdad el impacto de la sequía y la guerra en Ucrania, ya que las que hay no se han ejecutado aún y solo van a cubrir alrededor del 3% de las pérdidas del sector. La organización critica que el Gobierno quiera multiplicar las ayudas que dice que da a base de ponerlas una y otra vez en los titulares, pero la situación del campo no mejora y las ayudas a los agricultores y ganaderos siguen sin llegar en la medida que deben.
También se quería destacar la negativa a retrasar la implantación del cuaderno digital de explotación, una adaptación de los ecorregímenes de la PAC a la realidad del sector agrario valenciano, medidas eficientes y reales ante los daños de fauna silvestre (jabalíes, conejos, caza mayor, flamencos, ardillas...), cada vez más evidentes en el campo valenciano.
También se pretende una modificación de la ley de mejora del funcionamiento de la cadena alimentaria para que implemente medidas reales para los productores y que la rebaja del IVA al consumidor de los productos agroalimentarios tenga una repercusión efectiva sobre quienes producen esos alimentos.
Unión de Uniones estima para este año unas pérdidas de producción de cultivos de unos 4.805 millones de euros y un sobrecoste estimado de los piensos de alrededor de 7.987 millones comparado con la media de los últimos cinco años y añade a esto el sobrecoste de otros importantes factores de producción como la energía y combustibles y los fertilizantes, que supondrían en torno a 1.370 millones de euros.
La Unió y las organizaciones de la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos consideran que su convocatoria ha sido un éxito y confían en que este toque de atención haga mover ficha a los miembros del Ministerio de Agricultura para buscar soluciones que afronten con seriedad y realismo la situación que está atravesando el campo.
Insisten en que el problema del campo es el problema de toda la sociedad y pide al Gobierno, al actual o al futuro, que tenga amplitud de miras y no abandone a su suerte a un sector tan estratégico y esencial como es el sector agrario.