VALÈNCIA. El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes, avanzó su intención de aplicar un código ético de buen gobierno para todas las federaciones, para evitar situaciones como la ocurrida en fútbol y la investigación judicial por posibles irregularidades durante la presidencia de Luis Rubiales.
"El CSD tiene sus propias competencias, tenemos que tener ese cuidado de no interferir, pero tenemos una obligación de tutela y lo vamos a hacer con la ley. Vamos a tomar medidas concretas en el ámbito de la prevención. Vamos a recuperar la idea de un código ético de buen gobierno que comprometa a todas las federaciones, vinculante, que garantice que todas las cosas se van a hacer bien desde el punto de vista ético y jurídico, con rigor y con honradez", afirmó.
Uribes, en declaraciones a La Hora de La 1, abogó por "combinar la represión y la educación" y por "recuperar la filosofía de un fútbol ejemplar y que pueda servir para marcar los caminos adecuados y correctos".
"Vamos a dar una oportunidad, así lo entendió la FIFA, para que el proceso electoral, doble proceso, con la elección de un presidente ahora y luego la renovación de la asamblea y otra elección de presidente, y todo este recorrido de meses hasta octubre o noviembre recuperemos las fortalezas de la federación, que representa al fútbol español, va con nuestra bandera, nuestro himno y tiene que estar reforzada en todo lo que significa la ética pública y la ejemplaridad", añadió.
Uribes apuntó que el desarrollo reglamentario de la nueva Ley del Deporte, aprobada en diciembre de 2022, es "una oportunidad grande" para actuar así, para "que haya fortalezas éticas y jurídicas que eviten que esto vuelva a suceder", en alusión al caso de la RFEF.
"Tenemos que protegerlo con fuerza, con compromiso de todos y que la corrupción, y los malos ejemplos se destierren para siempre. El Mundial 2030 no peligra. La FIFA tiene muy claro lo que significa España, lo que significa el fútbol y España como país con tradición y organización", agregó al ser cuestionado por la candidatura española junto a Portugal y Marruecos y sus recientes conversaciones con la FIFA.