VALÈNCIA. La candidatura de València como sede del Mundial 2030 reclamará este miércoles por burofax a la Federación Española de Fútbol (RFEF) y al Consejo Superior de Deportes (CSD) explicaciones sobre el proceso y los motivos por los que ha quedado fuera de la propuesta de sedes españolas para esa cita y desestimó que un retraso del Valencia CF en el envío de una documentación pueda justificarlo.
Además, se confirmó que el club envió firmado este mismo miércoles el contrato como propietario del estadio en el que se disputaría el evento, el Nou Mestalla, y se anunció la contratación de un consultor externo de la Federación Internacional (FIFA) para que realice una auditoría externa de la candidatura para convencer a este organismo, responsable final del Mundial, para ser incluida de nuevo.
Así se aseguró tras una reunión de la candidatura en el Palau de la Generalitat en la que participaron el president de la Generalitat, Carlos Mazón, la alcaldesa de València, María José Catalá, el director general de deportes, Luis Cervera, y la concejala de deportes de la ciudad, Rocío Gil.
El sábado, tras conocer la exclusión de la candidatura, hubo una primera petición de explicaciones vía correo electrónico que no ha sido atendida, según se explicó a los medios tras esta reunión. “Hemos esperado cinco días la contestación a nuestro amable requerimiento y no se ha atendido. Hoy nuestro posicionamiento es un poco más duro”, apuntó Catalá.
Cervera repasó un proceso que dijo que no ha seguido los pasos “habituales” en este tipo de eventos. “No había bases claras, ni un calendario fijo, sólo que sería en julio, no sabíamos el número de sedes que se fue negociando porque era una candidatura de tres países. No ha sido un proceso normal. Ha habido cambios de interlocutores, el proceso se ha ido redefiniendo sobre la marcha”, resumió.
El director general de deportes recordó que el Valencia no envió en su día el ‘stadium agreement’ (acuerdo del estadio), dijo que la Federación dio la opción de enviar un correo electrónico con la explicación de los motivos a los clubes que no lo hicieron al entender que no tenían suficientes garantías y admitió que la entidad de Mestalla lo hizo tarde.
“La RFEF dijo que podían admitir que no firmaran si enviaban un correo explicado que era por cuestiones de la FIFA. El Valencia tardó en enviarlo. Se menciona el 24 de junio como fecha tope y se envió el 28 de junio y eso dice la RFEF que ha desencadenado esta situación”, apuntó.
Cervera aseguró que siempre tuvieron la sensación de que estaban “dentro” y que quieren “entender lo que había pasado”, los “criterios” para excluirles y quién ha tomado la decisión, porque solo recibieron un “escueto” correo sin firmar de la Federación.
Catalá afirmó que esa explicación del retraso del Valencia CF no es válida. “No nos sirve porque entre ese día y el 19 de julio en el que se nos comunica se intercambiaron siete correos y tuvimos una videoconferencia. ¿Si estábamos fuera por qué siguieron trabajando con nosotros en la candidatura?”, se preguntó. “Queremos saber qué pasó entre el día 16 de julio y el día 19”, añadió.
Mazón aseguró que las explicaciones que se reclaman son las mínimas que se merecen los valencianos y que ahora las reclaman ya “con toda la contundencia y con su valor jurídico”, en referencia al burofax.
“Queremos que nos cuenten de dónde venimos, dónde estamos y hacia donde vamos”, apuntó el president, que lamentó la “falta de transparencia” que según cree ha presidido el proceso.
La alcaldesa de València explicó que quieren saber si el CSD participó en la decisión “y sobre todo, qué piensa, porque cinco días después no hay un posicionamiento”.
“El CSD debe salir de su silencio y decir si participó o no, si está de acuerdo o no y si va a hacer algo o no. Exigimos que se pronuncie”, afirmó la alcaldesa, que pidió implicación a lo altos cargos valencianos de este organismo y del gobierno central “y a alguna ministra”.
“Me parece bien que la Delegada del Gobierno diga que no van a tirar la toalla pero me parecería mejor que se pronunciara el CSD”, apuntó Catalá, que mostró su escepticismo porque vaya a pasar. Y rechazó las críticas por un posible retraso de la ciudad.
“Hay que tener mucho rostro para que digan que la ciudad llega tarde quienes en los ocho años anteriores no han hecho nada”, añadió tras recordar que en las últimas semanas se ha concedido la licencia para retomar las obras y se han aprobado las fichas urbanísticas.