VALÈNCIA. Varios alcaldes y alcaldesas de l'Horta Sud, como los de Benetússer, Massanassa, Catarroja y Paiporta mostraron este lunes su enfado y frustración ante lo que consideran "falta de coordinación" de la Generalitat en varios ámbitos. Especialmente en el ámbito de la educación, tras el accidente de Massanassa en el que falleció un operario, pero no solo en ese. Tres alcaldesas socialistas, las de Catarroja, Paiporta y Benetússer, han reclamado tener representación en el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi).
El accidente mortal este domingo en un instituto de Massanassa ha encendido todas las alarmas y aumentado la preocupación por la apertura de los centros educativos en las localidades más afectadas por la Dana. Mientras que los alcaldes siguen a la espera de que la Conselleria de Educación ofrezca más información, algunos de los centros educativos de las localidades de Benetússer, Massanassa y Catarroja se mantendrán cerrados hasta nuevo aviso.
El Ayuntamiento de Benetússer comunicó, tras el accidente, que no reabrirá sus centros hasta que la Conselleria certifique una vuelta a las aulas segura y con todas las garantías. Del mismo modo, el alcalde de Massanassa, Paco Comes, informó de que dos de sus centros educativos, el CEIP Lluís Vives -donde ocurrió el accidente- y el Ausiàs March, se encuentran catalogados en nivel “rojo” tras las primeras inspecciones técnicas, por lo que se mantendrán cerrados. Respecto a la situación del Lluís Vives, el alcalde manifestó que "evidentemente, el colegio es un centro que se va a tener que hacer nuevo, aunque no tiene nada que ver con el nivel rojo".
La alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent, explicó este lunes a Valencia Plaza que el IES Berenguer Dalmau y el CEIP Vil·la Romana se encuentran catalogados en nivel “rojo”, aunque el Ayuntamiento aún no ha recibido un informe exhaustivo de parte de la Conselleria. Desde el Consistorio se está llevando a cabo la actuación para instalar aulas prefabricadas en las que reubicar a los, aproximadamente, 1.500 alumnos del instituto Berenguer Dalmau, según la alcadesa.
De manera provisional, los alumnos del instituto público de Catarroja se encuentran recibiendo clases online desde el 18 de noviembre, después de que rechazaran de manera "unánime" el plan de la Generalitat de trasladaros a diario a otro centro en Picassent.
Por el momento, la Conselleria está gestionando los traslados de algunos de los alumnos de las localidades afectadas a colegios de zonas cercanas, como en el caso de Catarroja a la localidad de Albal o en el caso de Benetússer a València y a Alcàsser. Sin embargo, en el IES de Massanassa sí se está ya está dando clases.
El Ayuntamiento de Benetússer no reabrirá sus centros educativos hasta que la Conselleria de Educación haga público el documento que certifique que la vuelta a las aulas "tiene todas las garantías de seguridad necesarias".
El Consistorio de Benetússer señaló el domingo en un comunicado que desde el 12 de noviembre, cuando en una reunión entre los equipos directivos de los centros educativos, la Conselleria de Educación y el Ayuntamiento se pactó el 25 de noviembre como fecha para el reinicio del curso escolar, en el municipio llevan esperando esa información.
Ante la falta de una confirmación oficial del buen estado de los centros educativos, el Consistorio de Benetússer ha decidido suspender la reanudación de las clases prevista este lunes para los cerca de 2.000 niños y niñas de la localidad. Las mismas fuentes han señalado que la empresa contratada por la Conselleria para realizar las inspecciones, Tragsa, ha trasladado verbalmente el resultado de sus trabajos, que es favorable para la reapertura, pero no se ha facilitado "ningún documento oficial" que lo corrobore.
“No entendemos nada. La gestión de la Conselleria de Educación es una auténtica chapuza. Nos amenazan con que si no abrimos el día 25 de noviembre se llevan al alumnado a otros centros fuera del municipio, pero llega el día de abrir y no tienen el certificado de estabilidad y seguridad del edificio", criticó la concejala de Educación, Ana Martín. La edil destacó que han "trabajado muy duro para poder tener los centros en condiciones en solo diez días, pero se ve que la Conselleria está en otras cosas".
De esta forma, el regreso a las aulas en los cuatro centros de educación Infantil y Primaria de Benetússer: Blasco Ibáñez, Cristobal Colón y Vicent Ricart y el de Secundaria María Carbonell queda suspendida "sine die" hasta que la Conselleria de Educación traslade la información necesaria.
Como consecuencia de ese malestar, las alcaldesas de Catarroja, Lorena Silvent; Paiporta, Maribel Albalat, y Benetússer, Eva Sanz, tres de los municipios afectados por la dana, exigieron este lunes tener representación en el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi), al tiempo que denunciaron "una demora inaceptable en las actuaciones" cuando está a punto de cumplirse un mes de la riada.
Las alcaldesas criticaron, en un comunicado conjunto, que los lodos "siguen llenando calles y garajes, los centros educativos siguen sin reabrirse, las infraestructuras municipales están destruidas y los problemas se acumulan sin que los responsables de la emergencia den soluciones". Por ello, denunciaron "la inoperancia, falta de coordinación y directrices claras para hacer frente a las devastadoras consecuencias que la Dana ha provocado en sus localidades" y en las que se sienten “abandonadas”.
Según apuntaron, una de las situaciones más urgentes en estos momentos es la retirada de lodos en garajes, huecos de ascensor y sótanos privados, así como de los vehículos que todavía no han podido ser sacados de los garajes subterráneos. Por ello han reclamado "celeridad en los procedimientos porque se están lastrando unas actuaciones que pueden acabar siendo un problema de salud pública".
Estas localidades inciden además en que se está actuando "sin descanso a través de los medios propios y privados disponibles, mientras que Generalitat Valenciana y Diputació de València siguen sin actuar".