VALÈNCIA. El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, considera que, "los discuta o no un juego", los pagos realizados por el FC Barcelona a José Enríquez Negreira durante 17 años "son inaceptables y han manchado el fútbol español", mientras que también asegura que el tema arbitral es un de las cosas que "más" le preocupan en este momento y por ello hizo "un llamamiento a la calma", pero también la necesidad de hacer "una reflexión profunda" sobre el funcionamiento de este colectivo.
"Las imputaciones de diferentes presidentes las discutirá un juez, pero los pagos a Negreira, los discuta o no un juez, son inaceptables y han manchado el fútbol español. Es indiscutido por cualquier persona que tenga un poco de sensatez a la hora de analizar que no puedes pagar 7,5 millones de euros al segundo de los árbitros durante casi 20 años. Estoy seguro que es indiscutido también en Cataluña", señaló Francos en 'El Larguero' de la cadena SER.
El dirigente advirtió que tiene una relación "excelente" con el presidente Joan Laporta, al que tiene "muchísimo aprecio", y aclaró que no pidió su dimisión en una entrevista. "Lo que quise decir es que en estos casos es muy complicado que la gente no pida responsabilidades ante según qué situaciones", puntualizó.
"A la quinta repregunta, lo que dije es que podía hablar por mí y lo que digo es que la responsabilidad política la tenemos en un listón donde, a veces por desgracia, la pena del telediario se te puede llevar por delante. No tengo por costumbre, y no lo hice por cierto ni con el señor Rubiales, pedir la dimisión de terceras personas. Creo que la dimisión es una cosa muy personal que tiene que ser la conclusión de una reflexión de alguien", añadió al respecto.
El mandatario no quiso polemizar sobre las palabras de Laporta de la existencia de un madridismo sociológico muy influyente. "El Barça es un club muy querido en España y lo noto y lo veo. Laporta es un gran aficionado del Barça y a veces piensa que hay un madridismo inoculado en el resto de España y yo creo que el deporte y el fútbol español no sería lo que es hoy sin el Barça, al que se tiene más respeto de lo que imaginamos por lo que es y representa. Ha tenido años gloriosos donde nadie se atrevía a discutir quien era el que mejor jugaba al fútbol", subrayó.
Por otro lado, confesó que le preocupa "mucho" lo que está sucediendo actualmente con el tema arbitral. "Es de las cosas que más me preocupa actualmente en el deporte español y me gustaría que calmásemos los ánimos", pidió Francos, que cree que "el arbitraje requiere una reflexión más global" e insistió en "un llamamiento a la calma".
"Hay que pensar en algunos cambios en el mundo de arbitraje, cosas sobre las que podríamos reflexionar con naturalidad", manifestó, citando entre ellas, con "cautelas y dudas", que los árbitros "puedan explicar sus decisiones tras un partido o en directo en el estadio", que la sala VOR "esté en los estadios", que se puedan hacer "públicas" las conversaciones con esta sala VOR o que las designaciones sean "por sorteo".
Por este motivo, ha hablado con Pedro Rocha, presidente de la Comisión Gestora de la RFEF, de su deseo de "hablar del tema del arbitraje y de hacer una reflexión a fondo". "Quiero proteger a los árbitros y creo que las medidas que he dicho pueden ayudarles a tener más credibilidad", admitió. "¿El CSD quiere decidir el modelo arbitral? No. Pero sí poner encima de la mesa que hay un problema y debates a los que no hay que tener miedo", aclaró.
Finalmente, Víctor Francos no olvida que en el fútbol "ha habido demasiada pelea". "A mí una cosa que no me ha gustado en los últimos tiempos, y lo han sufrido más mis antecesores que yo, es que algunos decidieron en algún momento convertir el CSD en el 'ring' de su pelea y que si su presidente no se 'mojaba'", lamentó.
"Yo lo he sufrido también, lo sufro permanentemente. No lo digo por mi comodidad, pero sí que digo que hay que calmar el fútbol. Y también digo, con toda la tranquilidad del mundo, que creo que ahora, por las circunstancias que se han dado, estamos en disposición de tener un fútbol más calmado que hace cinco meses", sentenció el presidente del CSD.