VILA-REAL. El Ayuntamiento de Vila-real continuará aplicando bonificaciones del IBI al comercio y hostelería en 2023 como medida de incentivo para favorecer la actividad en la actual coyuntura de crisis. De esta manera, el consistorio se mantiene en su línea de facilitar la actividad económica a través de instrumentos fiscales que permitan a las pymes y autónomos disponer de mayor liquidez.
Así lo ha asegurado el alcalde, José Benlloch, quien ha anunciado que el Ayuntamiento volverá a aplicar por tercer año consecutivo bonificaciones en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a hostelería y comercio, aunque con reajustes debido a la complicada situación económica del Ayuntamiento.
Así, se exonerará el 95% del IBI a los locales de hostelería sin terraza y a otros comercios minoristas más afectados por la crisis, mientras que los establecimientos de hostelería con terraza continuarán con bonificaciones del 50% en el recibo del IBI. Este porcentaje se ha ajustado teniendo en cuenta que los bares y restaurantes con terraza seguirán beneficiándose además de la exención del 100% de la tasa por ocupación de vía pública, que el equipo de gobierno ha decidido prorrogar también en 2023.
“Ahora que por fin tenemos cuadrado el presupuesto, no sin dificultad, y tras el acuerdo con los sindicatos en la Mesa de Negociación, podemos sacar adelante las cuentas de este año y anunciar una medida en la que hemos trabajado desde la prudencia y la responsabilidad, dada la complicada situación económica del Ayuntamiento”, explica Benlloch, quien añade que “hay que tener en cuenta que arrastramos el impacto de tres crisis encadenadas, la financiera de 2008, la pandemia y ahora la guerra de Ucrania, sumadas al desastre que para las arcas municipales ha supuesto la gestión que hizo el gobierno del PP con el urbanismo y la deuda, con 34 millones de euros pagados por empastres urbanísticos y un préstamo de 20 millones por el que acabaremos pagando 28 millones”.
Benlloch defiende que a pesar de "todas estas dificultades, hemos hecho un esfuerzo para cuadrar las cifras y seguimos apostando por una medida de bonificaciones fiscales que creemos que ha tenido un impacto positivo para la supervivencia de los establecimientos y negocios de nuestra ciudad”.
Así, según los datos de la Concejalía de Hacienda, en 2022 se atendieron 365 peticiones de bonificación del IBI de locales de comercio y hostelería. Esto supone que el Ayuntamiento dejó de ingresar 385.000 euros para favorecer la recuperación económica que se suman a los 335.000 euros de 2021, de manera que el total bonificado en los dos últimos ejercicios asciende a 720.000 euros.
Por otro lado, el alcalde ha confirmado que se mantiene la exención del 100% de la tasa por ocupación de vía pública para las terrazas, así como para los mercados ambulantes y ferias, una medida que se prorroga por cuarto ejercicio consecutivo y que, desde 2020, ha supuesto un total de 540.000 euros bonificados.
En el caso de las terrazas de la hostelería, Benlloch señala que de momento también continuará en vigor la ampliación de espacios que se aplicó durante la pandemia. “El objetivo es que en los próximos meses podamos comenzar a trabajar en una modificación de la ordenanza de ocupación de vía pública de cara a 2024, en condiciones, con mejoras y en consenso con el sector de la hostelería, y de manera especial con la colaboración de la Asociación de Hostelería y Ocio de Vila-real, Ashiovi”.
El alcalde ha dado hoy mismo instrucciones al concejal de Hacienda, Xus Madrigal, y al departamento para definir los requisitos y los sectores beneficiarios de la bonificación del IBI, que se harán públicos la próxima semana, para que los interesados puedan presentar la solicitud.