VILA-REAL. La historia de Vila-real y la de la iglesia arciprestal San Jaime se entrecruzan desde los orígenes. Si el 20 de febrero de 1274, el rey Jaime I firmaba la carta fundacional de Vila-real, la primitiva iglesia parroquial se remonta al 22 de febrero de aquel mismo año. En 2024, Vila-real celebrará, pues, el 750 aniversario de su fundación y también los 750 años de la parroquia de San Jaime.
Por este motivo, el alcalde, José Benlloch, se ha reunido con el vicario general de la diócesis y párroco de la arciprestal, mosén Javier Aparici, para compartir propuestas y colaborar con el aniversario de la iglesia Mayor. Con este objetivo, el alcalde propondrá a los grupos municipales dos convenios para el próximo año: una colaboración de 15.000 euros para las actividades del aniversario y un segundo convenio de 150.000 euros para hacer accesible y acondicionar el museo parroquial como tercer pilar del proyecto de turismo religioso de Vila-real, junto con San Pascual y la Casa Museo de Llorens Poy.
“Que la ciudad de Vila-real y nuestra iglesia arciprestal celebremos al mismo tiempo un aniversario tan señalado como los 750 años no es casualidad; es, sin duda, un reflejo, de la trascendencia que la iglesia Mayor San Jaime ha tenido en la historia de los y las vila-realenses desde nuestros mismos orígenes. Por eso, hemos querido poner encima de la mesa todas las ideas y compartir las propuestas en las que estamos trabajando, las planteadas por el comisionado del 750 aniversario y por la ciudadanía, además de las que está planteando la comisión creada por la arciprestal, que son muchas y muy interesantes”, destaca Benlloch de la reunión, en la que también han participado los concejales Emilio M. Obiol y Javier López.
Ambos, junto con Noelia Samblás, conforman el equipo designado por el alcalde para coordinar el 750 aniversario de la fundación de Vila-real, que planteará al resto de grupos los avances de la conmemoración de la efeméride en la comisión informativa de Calidad de Vida convocada el próximo jueves, 21 de diciembre.
“La idea es que podamos compartir algunos de los actos en los que estamos trabajando, tanto la iglesia como el Ayuntamiento, para celebrar juntos, como nacimos, nuestros respectivos aniversarios”, valora Benlloch. En esta línea, una de las actividades a las que podría sumarse también el aniversario institucional es una visita al monasterio de Poblet, donde reposan los restos del fundador de Vila-real.
“Pero no sólo queremos integrar algunos de los actos conmemorativos; el Ayuntamiento quiere y debe colaborar también con una de las instituciones más importantes y representativas de nuestra ciudad en la celebración de su aniversario, tal y como hemos hecho en estos últimos años, en alianza con la sociedad, con otras entidades que han celebrado efemérides destacadas”, argumenta el alcalde. Con este objetivo, el gobierno municipal propondrá a los grupos un convenio de 15.000 euros para financiar gasto corriente.
Además, Benlloch planteará un segundo convenio de inversión, dotado con 150.000 euros, en la línea de otros acuerdos firmados con entidades en estos años, como Els Lluïsos (ascensor), el Sindicato de Riegos (accesibilidad y adecuación del salón social), Cáritas Diocesana (Casa de acogida San Pascual El Pati) o la nueva sede de Cruz Roja Vila-real, entre otros. Con esta inyección, el alcalde quiere impulsar uno de los proyectos en los que se ha estado trabajando en estos últimos años: el museo parroquial.
“La iglesia arciprestal es uno de los pocos BIC que tenemos en Vila-real y, además, alberga una de las mayores colecciones parroquiales de la Comunitat, con muestras excepcionales de arte religioso como las de Paolo de San Leocadio.
Con este acuerdo, queremos hacer accesible y acondicionar la primera planta de la iglesia para impulsar el museo parroquial y crear un nuevo espacio museístico en la ciudad, que, junto a la basílica de San Pascual y la Casa Museo de Llorens Poy, adquirida recientemente, completará el proyecto de turismo religioso y generará nuevas oportunidades para esta nueva Vila-real del siglo XXI que construimos entre todos”, concluye Benlloch.
