VILA-REAL (EFE). El Villarreal afronta la recta final de la temporada con el objetivo de alcanzar la séptima plaza, que da en principio derecho a disputar la Conference League, algo para lo que necesita firmar un último tramo casi perfecto para lo que quiere darle la vuelta a su actual balance negativo de goles marcados y recibidos.
Desde que Álvaro Pérez abrió el marcador para el Betis en la derrota que sufrió el equipo 'groguet' en la primera jornada de la Liga, el Villarreal apenas ha tenido dos momentos en los que su balance de goles ha estado equilibrado y nunca ha llegado a estar en positivo.
La primera vez en la que retomó el equilibrio fue en ese mismo encuentro al empatar media hora después y después tras la segunda jornada, en la que se impuso 0-1 al Mallorca y el balance era de 2-2.
Ahora mismo, el equipo que dirige Marcelino García Toral acumula 48 goles a favor y 53 en contra por lo que uno de sus retos es reequilibrar ese balance para ayudar a ese final de temporada que persigue para aspirar a ser séptimo.
En las últimas diez jornadas del Villarreal tiene un registro positivo en un goles y ha mejorado ese balance al marcar 21 goles y recibir solo 12, casi la mitad. Si mantuviera es promedio podría darle la vuelta al balance en este tramo final del curso.
De las 24 temporadas que el equipo milita en la máxima categoría, solo ha finalizado con registro negativo de goles en seis de ellas. La última vez fue en la campaña 2018-19 cuando marcó 49 goles y sus rivales le hicieron 52. Antes, también acabó en negativo en la 2011-12, 39 a favor y 53 en contra; en la 2003-04 con 47 logrados y 49 recibidos; en la 2002-03 con 44 frente a 53; en la 2001-02 con 46 suyos y 55 de sus rivales y en la 1998-99, en la que marcó 47 y sacó el balón de sus redes en 63.