Anaya exprime sus opciones para hacerle un roto a Mazón en la carrera por liderar el PPCV

VALÈNCIA. Pocos lo esperaban al inicio de la jugada, pero el escenario actual en el PPCV, si nada cambia a lo largo de estas jornadas, es que el 4 de junio habrá votación para elegir a nuevo líder. El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, es el candidato favorito. Pero no único pese a que esos fueran los deseos de la dirección nacional. El alcalde de Ayora y hasta hace poco 'número 3' del partido en la provincia, José Vicente Anaya, se resiste a retirarse pese a que hasta hace diez días se daba por hecho su paso atrás. 

Si al principio eran numerosas las voces que vaticinaban que su intención real era la de integrarse en la próxima ejecutiva, ahora ya nadie aventura lo que ocurrirá. Anaya anunció que se presentaba cuando Isabel Bonig todavía era presidenta del PPCV, la cual acabó dando un paso al lado ante voluntad de Génova de que Mazón liderara el partido. Este último oficializó posteriormente su candidatura con un acto de exhibición de fuerza y apoyo de numerosas familias populares. Algo que también demostró en la presentación de avales. Llegó a entregar casi 12.000, mientras Anaya se quedó en 235 y pasó el corte –aunque señaló que tenía alrededor de 500–.  

El alcalde de Ayora, sin escenificaciones y con un mensaje de ser el "aspirante de las bases", ha ido haciendo campaña silenciosa. A la vez que entre ambos candidatos se han producido encuentros y conversaciones. En total, según fuentes del partido, se han reunido en tres ocasiones, la última a finales de la semana pasada. El "me lo pensaré" para luego nada, reconocen fuentes del PPCV, ha generado desconcierto. Mazón le ha ofrecido integrarse, pero, a juicio de Anaya, la propuesta resulta insuficiente y poco concreta. En conversación con este periódico, asegura que no le ha pedido, ni para él ni para su equipo, ocupar el 'número dos' de la dirección –que el presidente de la Diputación de Alicante ya anticipó que sería para María José Catalá–. Pero indica que tampoco puede creer con "fe ciega" en las promesas. Motivo por el que considera que no se dan las condiciones para sumar fuerzas. "La gente nos está pidiendo que sigamos y seguiremos", afirma. 

Anaya no escatima en sus críticas a las direcciones, con mención especial a la provincial que dirige Vicente Mompó, por poner al aparato al servicio de Mazón y por pedirle la dimisión. Desde el entorno del primero responden que el alcalde de Ayora "traicionó en su momento la confianza que le había dado Mompó, quien lo puso de 'número 3' del partido en un esfuerzo de integración de varias sensibilidades". De hecho, pertenecía a la corriente de María José Catalá. "Esa confianza depositada la ha usado trabajando cinco meses a espaldas del presidente en un proyecto personal. No había otra alternativa a pedirle la dimisión", añaden las mismas fuentes. 

Anaya admite que tiene "las cosas difíciles" de cara a la votación porque cuenta con toda la estructura en contra. En este sentido, relata que se ha encontrado con llamadas de agrupaciones comunicando que tienen avales para él y, de repente, "ya no". 

Mazón elude entrar al enfrentamiento

Desde el entorno de Mazón evitan opinar de estas valoraciones en una reacción que responde a no darles demasiada trascendencia. Así, se ciñen a remarcar que ha habido propuesta de integración y que el alcalde de Ayora no les "preocupa". Aunque resulta evidente que, salvo sorpresa absoluta, el presidente de la Diputación de Alicante saldrá victorioso del proceso, tampoco se puede soslayar el hecho de que restar un porcentaje de apoyos a Mazón supone hacerle un roto en esta carrera por el liderazgo. 

Uno de los momentos clave tendrá lugar este viernes, cuando finaliza el plazo de inscripciones para votar el 4 de junio. La movilización que hayan logrado ambos candidatos resulta de suma importancia. Anaya ha recibido el impulso de miembros del Foro 2020, al que pertenecen excargos del PP como Francisco Camps y Pedro Agramunt y que tiene su fuerte en València ciudad. A ello se suma la estrategia de tratar de aglutinar a sectores de cierto descontento. Un exceso de confianza de Mazón sobre su victoria podría suponer una merma a la hora de vencer sin contestación interna. 

Una vez se hayan producido las inscripciones, tendrán que realizarse las pertinentes comprobaciones, entre ellas el cumplimiento de la condición de estar al corriente de pago. Si Mazón obtiene más del 50% de los votos emitidos y una diferencia igual o superior a 15 puntos sobre Anaya, será proclamado candidato único. Algo que es probable que suceda, pero habrá que esperar al próximo viernes.