El grupo hizo una primera toma de contacto el viernes y adelanta hacía dónde evolucionarán
VALÈNCIA. Don Rogelio J y los suyos vuelven a las andadas, y como siempre, no lo hacen de una manera usual. Tienen un nuevo disco entre manos que les quema, y este viernes le dieron el pistoletazo de salida en la sala Magazine -tal vez el club de València por el que más han pasado y que mejor define su música canalla- con un concierto autodenominado “crowdfunding vintage”. En él se dedicaron a hablar de tú a tú con su público para presentar los nuevos temas que formarán el disco y pedir ayuda para pedir otros temas de calado, como las letras o los títulos de las canciones: “al final es un lío, porque siempre tienes tres o cuatro ideas, las dices medio en broma y de repente la que más gusta es la que más odias tú. Al final haremos un poco lo que nos de la gana, como es natural”, cuenta Rogelio. En efecto, el viernes se presentaron un buen puñado de ideas, y es tradición en los bolos del grupo que entre canción y canción salga el lado más show-man de la banda, algo que sirve seguro para contar con un público que se interesa por el día a día del grupo: “pusimos a la venta también el merchandising con un precio súperreducido porque por una parte, queremos deshacernos de él, y por otra, es una manera de premiar a la gente que ha pagado por un bolo en València sin teloneros y con canciones que aún no conocen”, explica.
Más allá de esto, Aullido Atómico reinvindica con esta acción la relación estrecha que tiene con sus fans y empieza a montar los engranajes del que será su próximo disco al igual que dijeron con Decandendia, su anterior trabajo. Entonces, mientras hacían muchos conciertos acústicos, empezaron a presentar las canciones que tenían preparadas: “lo hicimos porque no podíamos no tocarlas, era lo que no parábamos de ensayar. Nos gustó lo que pasaba porque la gente daba su opinión y esta vez lo hemos querido hacer algo más oficial”. Además el bolo del viernes les ha servido para empezar a recaudar fondos para costearse parte de la grabación del disco. Esta es la enésima manera creativa de las bandas valencianas para encontrar cómo sacar adelante un LP sin morir en el intento.
La maquinaria está recién engrasada, y Aullido Atómico encara con ilusión y fuerza su próximo proyecto, y a pesar de ser “top secret” (salvo los detalles de los que pudieron disfrutar en exclusiva los asistentes el pasado viernes), Don Rogelio J ha podido adelantar algunos detalles a Culturplaza.
Ya se puede decir que entrarán en estudio a partir del 4 de marzo y estarán unos días grabando sonido directo en los estudios de La Mina a cargo de Raúl Pérez (responsable también de trabajos para Pony Bravo, McEnroe o Novedades Carminha). Volverán al lugar donde grabaron Decadencia para “hacer paellas a saco” al lado de Oskar Venas, un fichaje que hará el papel de mirada externa y complementará la labor de Pérez. Además, el miembro de Cabezafuego y Transalpine Boys, seguramente acabe metiendo algún arreglo de guitarra y contribuyendo de alguna forma al disco. También podría formar parte del equipo Ernest Aparici (Apa), de Las Víctimas Civiles, que incluirá vientos en las canciones. Aunque claro, todo está por ver.
En cuanto a la evolución de sonido, aseguran que serán tan continuistas como nunca y como siempre: “nunca renunciamos a nuestro sonido pero el concepto suele cambiar porque nos interesan cosas diferente”. ¿Hacia dónde irán los tiros de este? Pues hacia una mayor complejidad, sin salirse del tiesto (“No somos Queen ni vamos a hacer una ópera rock”, aseguran): “Normalmente, nuestras composiciones tenían dos cambios y cuando había un tercero, aprovechábamos y hacíamos una nueva canción. En este disco hemos decidido que no sea así, así que estarán más trabajadas a pesar de seguir siendo canciones de dos minutitos y medio para bailar”.
Se prevé que acaben de grabar en pocos días, lo mastericen también en La Mina y puedan sacar el disco al final del verano, aunque seguramente nos iremos de vacaciones con dos adelantos ya publicados para hacer la espera más amena.
Si bien siempre han formado parte de la escena rock independiente y siempre han defendido venir del underground, la evolución de Aullido Atómico se hizo exponencial con su segundo disco, Todo y ahora, y definitivamente con su tercero y hasta ahora último trabajo, Decadencia. En el espíritu del grupo está girar mucho el disco (“no hacemos música para ser escuchada sin más, nos encanta poder enseñarlas todo lo que sea posible”, cuentan), y así será con el próximo trabajo. Como ya han hecho anteriormente, harán carretera y manta y recorrerán media España. Sin embargo, la vida de Don Rogelio J, Jussi Folch y Quique Gallo, ejemplifica una parte importante de la escena valenciana y española: “nos gusta hacer giras, pero somos tres personas con vidas diferentes y ni vivimos de esto ni podemos permitirnos perder días de trabajo porque sí. Cuadraremos agenda y haremos todo lo que podamos, pero también esperamos un mínimo de dignidad laboral”, explican.
20 años de carrera en València le han servido para publicitar desde conciertos hasta cartas de bares
