CASTELLÓ. Durante esta semana, del 9 al 13 de agosto, el Ayuntamiento de Burriana está realizando el tercer tratamiento intensivo contra los mosquitos de este verano. Se trata de un refuerzo con larvicidas y adulticidas para evitar su proliferación, que se suma a las actuaciones de control ordinarias que la concejalía de Salud realiza todo el año a través de la empresa concesionaria Lokímica, así como ha informado el consistorio en un comunicado.
Como ha explicado la concejala de Salud, Dolores Carbonell, “se ha intensificado el tratamiento durante esta semana en los imbornales, en zonas de vegetación cercanas al núcleo urbano, en el cauce del río, en el Clot y en la zona litoral”. Además, la empresa ha establecido puntos de monitorización del mosquito tigre en zonas propicias a su aparición, para hacer un seguimiento.
Asimismo, Dolores Carbonell ha asegurado que “el Ayuntamiento localiza los focos privados potenciales, como fincas con acequias o bidones con agua estancada, y les comunica a los propietarios que deben realizar la limpieza de la zona o, en caso contrario, se les aplicarán las sanciones que recoge la ordenanza municipal”.
Por otra parte, se ha aprovechado para realizar un tratamiento específico para evitar la aparición de pulgas y garrapatas en la zona del paraje natural del Clot de la Mare de Déu.
Por ello, la edila ha insistido en la necesidad de que los vecinos y vecinas del término municipal “eviten estancamientos de agua en cubos, bidones y balsas, lo que puede derivar en sanciones”.
La regidora de Salud ha recordado que se debe mantener el término municipal en las mejores condiciones sanitarias posibles para evitar “los efectos que los mosquitos causan a la ciudadanía, como picaduras y reacciones alérgicas locales”, por lo que el Ayuntamiento desarrolla un tratamiento terrestre contra los mosquitos “durante todo el año y se potencia e intensifica en caso de necesidad, como ocurre ahora en período estival”.
Respecto a este tratamiento intensivo de agosto, al que seguirá otro en septiembre, Carbonell ha explicado que se trata de jornadas intensivas con nebulizaciones e inspecciones que duran 5 días y que complementan tanto las fumigaciones ordinarias para reducir la población adulta como los tratamientos para larvas en acequias y en los focos detectados en vía pública.
Todas estas actuaciones desarrolladas por el consistorio son respetuosas con el medio ambiente, no afectan a la calidad de las aguas y se complementan con los tratamientos aéreos que realiza puntualmente la Diputación de Castelló, que se centran en las zonas agrícolas, de marjal y fluviales.