Foto: JORGE GILVALÈNCIA (EP). El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha asegurado este viernes que la entidad no se plantea cobrar a los clientes minoristas por sus depósitos aunque el Banco Central Europeo (BCE) lleve a cabo nuevos recortes en los tipos de interés, aunque sí que lo hará a las grandes contrapartidas financieras y empresariales.
Gortázar, en la rueda de prensa de presentación de los resultados del primer semestre del año, ha constatado al respecto que "esta situación no es nueva" ya que "los tipos de interés ya están en un entorno en negativo y los mercados están asumiendo que puede bajar".
Pese a ello, ha destacado que la entidad ya decidió que "no es adecuado repercutir los tipos a los clientes minoristas", pero "sí a las grandes contrapartidas". En ese sentido, ha explicado que la relación con los cliente particulares no será rentable solo con los depósitos por esta situación de los tipos, pero buscarán la rentabilidad "por el conjunto de la relación y no solo por la cuenta corriente".
Preguntado por la posibilidad de cobrar por cuentas que no tenga mucho movimiento, ha señalado que ya se lleva tiempo repercutiendo los costes a las grandes contrapartidas, como hacen también otras entidades, y ha considerado "probable que vaya a más" en este entorno de más negatividad de los tipos.
Gortázar ha indicado que el plan estratégico 2019-2021 se elaboró en noviembre de 2018 con las estimaciones del mercado de futuros sobre los tipos que preveían una leve subida y ya se apuntó que en el caso de que finalmente no subieran "habría un impacto sobre la rentabilidad en 2021 de forma que en lugar del 12% sería el 10% si no se hace nada más". No obstante, ha garantizado: "el desafío de alcanzar las metas es aún mayor pero no tocar revisarlas porque podemos hacer frente a esa presión", ha garantizado.
Así, ha aclarado que esta hipótesis de "si no hacemos nada más no es cierta" porque durante estos tres años "tenemos la oportunidad de seguir gestionando la operativa del grupo para compensar los efectos negativos".
"La realidad es que en estos momentos vemos mucha presión porque los tipos no solo no es que no suben sino que han ido a la baja, por lo que tenemos la obligación de buscar cómo podemos compensar estos impactos negativos", ha señalado.
Un ejemplo de estas mecanismos, ha desgranado, es adelantar a 31 de julio la salida voluntaria de 2.000 trabajadores, lo que permitirá un ahorro del 3%, es decir, de 80 millones de euros. Además, ha apuntado que hay muchas otras actuaciones en las que se está trabajando como "la buena marcha comercial que mejorará los resultados en el futuro aunque no se vean a corto plazo".
Por otro lado, respecto a la caída de la entidad en bolsa del 6,2% después de comunicar sus resultados, que reflejan un descenso del 52,1% del beneficio semestral hasta los 622 millones tras asumir el coste del acuerdo laboral, ha comentado que el mercado "reacciona a toda la información nueva que se da y a las percepciones que tiene el sector". "Nosotros seguiremos trabajando para hacer las cosas lo mejor posible", ha señalado.
En ese sentido, ha apuntado que la bolsa refleja "el panorama de tipo de interés a la baja y por tanto depresión de ingresos" como están confirmando los resultados de entidades que operan en la eurozona.
Gortázar ha señalado que el mercado es "volátil" y ha confiado en que el "cierto ajuste" que ha registrado CaixaBank en bolsa "se corrija". En cualquier caso, ha apuntado que son "los inversores los que compran y venden y hay que estar cada día a lo que hacen". Al respecto, ha remarcado la importancia de los inversores que "no reaccionan el día de presentación de resultados y cuyo impacto se ve a largo plazo, por lo que en otras ocasiones ya se han visto recuperaciones importantes de la acción después de una reacción inicial negativa".
Por otra parte, ha rechazado comentar la petición de la Fiscalía Anticorrupción de imputar al BBVA como persona jurídica por el 'caso Villarejo ni el conflicto judicial entre el que iba a ser consejero delegado del Santander Andrea Orcel con la entidad. "No me gusta comentar sobre temas que afectan a nuestros competidores como deseo que no lo hagan ellos sobre los que nos afectan a nosotros", ha argumentado.
Con todo, ha apuntado que la sociedad debe valorar la reputación de CaixaBank por "las acciones que figuran en hoja de servicios", ha recordado que el 40% de los frutos de su actividad en obra social y ha destacado que cuando hablan con sus clientes transmiten que tienen la entidad en "muy buena consideración". "Las llamadas a los problemas reputacionales del sector ya se han hecho y ahora hay explicar y recordar a la sociedad lo que se está haciendo", ha apostillado.
