MADRID (EFE). El exdirector de Inspección del Banco de España Pedro González ha explicado este lunes ante la Audiencia Nacional que Caja Madrid no conocía "la realidad de Banco de Valencia", principal participada de Bancaja, aunque "sí tenía elementos para haberlo conocido".
En calidad de testigo en el juicio por la salida a bolsa de Bankia, González ha reconocido que percibieron posibles problemas de gobernanza ya en la fusión de las siete entidades que dieron origen al grupo financiero, si bien confiaban en que "el liderazgo de Caja Madrid se impusiera".
Asimismo ha incidido en que la caja madrileña, entonces liderada por Rodrigo Rato, no conocía la situación en la que se encontraba Banco de Valencia, a diferencia de cuanto podría haber sucedido con Bancaja, cuyo presidente -y expresident de la Generalitat- José Luis Olivas llegó a estar al frente de su participada.
Así lo ha señalado González a la fiscal del caso, Carmen Launa, que pide entre cinco y dos años y siete meses de cárcel para los antiguos administradores de Bankia (Rato, Olivas, José Manuel Fernández Norniella y Francisco Verdú) por presunta estafa a inversores.
Delito que se suma al de presunta falsedad contable, como sostienen las acusaciones particulares y populares, que solicitan para ellos una treintena de antiguos directivos y el socio auditor, hasta doce años de cárcel. Antes de su intervención en noviembre de 2011, el 39 % del Banco de Valencia estaba en manos de Bancaja Inversiones (BISA), entidad que pasó a BFA tras la fusión.
Durante su declaración el pasado febrero, Olivas insistió en que la sociedad, cuyas cuentas "eran públicas" al ser un valor cotizado, no formaba parte del proceso de integración que originó Bankia, y que departía sobre este asunto con Rato "de cuando en cuando", pero sin entrar en detalles.