VALÈNCIA. Renunciar. Eso fue lo que hizo finalmente este lunes el hasta ahora líder autonómico de Ciudadanos, Toni Cantó, tras la reunión extraordinaria de la ejecutiva del partido. Un encuentro que varios dirigentes de la formación reclamaron la semana pasada cuando los naranjas y el PSOE anunciaron una moción de censura en la Región de Murcia para hacerse con la Presidencia del gobierno regional y que supuso todo un terremoto político nacional que también ha motivado además unas elecciones autonómicas en Madrid para el próximo 4 de mayo.
La cita en la sede naranja, que empezó con una hora de retraso, había generado expectación desde primera hora de la mañana. Especialmente entre los diputados del grupo parlamentario Cs en Les Corts, que seguían con atención las últimas horas de los diarios y los mensajes de los dirigentes nacionales a través de sus perfiles en redes sociales.
Los chats privados tampoco daban tregua y, desde bien temprano, comenzó a especularse con una posible salida del grupo parlamentario de los diputados afines al exsecretario de Organización autonómico y senador territorial, Emilio Argüeso. Unos portazos que seguirían la estela de descontento marcada el sábado por quien fuera el secretario de Organización nacional durante la etapa de Albert Rivera al frente del partido, Fran Hervías. Hervías anunció su marcha de Cs y apenas horas después dio el salto al PP.
Entre los nombres que circulaban para salir del grupo se encontraban el de Patricia García Guasp, Eduardo del Pozo, Cristina Gabarda, Vicente Fernández, Yaneth Giraldo, José Antonio Martínez y Jesús Salmerón. Unas salidas que varios de ellos ponían en cuarentena a corto plazo, si bien no descartaban que pudieran ocurrir a la espera de recibir indicaciones del sector afín a Hervías en la Comunitat.
Sin embargo, el anuncio de Cantó horas después de que abandonaba la dirección del partido y renunciaría al acta de diputado en Les Corts -que podría ir acompañada de uno de sus parlamentarios afines en la provincia de Valencia- revolvió de nuevo las piezas en el tablero y sumió a la todo el grupo en una situación de incertidumbre.
La marcha de estos siete diputados del grupo parlamentario para irse a no adscritos y posicionarse en las iniciativas de Les Corts junto al PP para seguir con la tesis de la alianza del centro derecha en la que había hecho hincapié Hervías no parecía una probabilidad clara, dado que perderían derechos como parlamentarios que ahora sí tienen reconocidos. Tampoco podrían formar grupo mixto, dado que aunque sean más de cinco parlamentarios, estos deben formarse al inicio de la legislatura.
Ahora bien, el adiós de Cantó, con quien ninguno de ellos ha mantenido una relación de sintonía en estos casi dos años de legislatura, abría la posibilidad de que este sector pudiera incluso ganar fuerza dentro del propio grupo parlamentario. De hecho, a media tarde comenzó a especularse ya con los nombres de un par de candidatas para suceder al síndic al frente de la portavocía y los diputados afines a Argüeso se apresuraron a advertir que el relevo debía producirse de forma consensuada. "No vamos a tragar con cualquier nombre. Va a tener que pactarse", subrayaban a este diario.
Una sustitución para la que, según fuentes consultadas por Valencia Plaza, Cantó estaría pensando en la diputada Ruth Merino, su mano derecha en esta legislatura y portavoz adjunta desde el inicio del mandato. Ahora bien, las mismas fuentes sostenían que por encima de las pretensiones del ya exlíder autonómico "se hará lo que diga la dirección nacional", donde el perfil que agrada es el de la parlamentaria Mamen Peris, que ya fue portavoz de Cs en la Diputación de Valencia en la legislatura pasada.
En cualquier caso, este martes está convocada a media mañana una reunión del grupo parlamentario en la que está previsto que el portavoz traslade los motivos de su marcha, así como para plantear el escenario futuro en el que queda el grupo. Una cita que sus señorías esperan como agua de mayo.
La moción de censura de Ciudadanos que Cantó tildó de "chapuza" no solo ha provocado consecuencias a nivel orgánico. También ha unido a dos antagonistas -Cantó y Argüeso- en una causa común. No en vano, ambos exdirigentes coinciden en la necesaria unión con el PP para aunar el ahora fragmentado voto del centro derecha y no en profundizar el entendimiento con el PSOE.
De hecho, el hasta este lunes líder de Cs en la Comunitat anunció a la salida de la ejecutiva que había pedido a Inés Arrimadas que el partido se presentara de forma conjunta con el PP a las elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid, además de retirar la moción de censura en Murcia. Una opción que fue descartada, según el propio Cantó.
Sin embargo, no solo comparten opinión sobre la estrategia que debería seguir el partido. Los diputados de cada sector cuestionaban este lunes con los mismos argumentos la maniobra de Arrimadas de ampliar el Comité Permanente para incluir a los críticos y relevar de sus cargos a Carlos Cuadrado y José María Espejo-Saavedra: "Es un paripé", expresaban desde el bando de Argüeso. "Quitarles las competencias pero mantenerlos en la dirección, en el núcleo duro, no va a ningún sitio porque significa que al fin y al cabo van a seguir tomando las decisiones después de todo lo que han provocado tras las catalanas y lo de Murcia. Y si amplías la ejecutiva, pero también la aumentas para mantener la mayoría con ellos, es todo un teatrillo para limpiar su imagen", subrayaba otro parlamentario del sector de Cantó.
Más allá de todas las explicaciones que dio a las puertas de la sede de su ya expartido el dirigente naranja, su despedida tampoco pasó desapercibida por la mención que hizo al expresidente de la formación, Albert Rivera, a quien no le han gustado varias de las decisiones que ha adoptado su sucesora en el cargo desde que esta tomara el control de Ciudadanos.
Varios cargos del PP creen así, que el exlíder es favorable al acercamiento de Cs al Partido Popular e, incluso, del trasvase de pesos pesados, tal y como ha hecho Hervías, uno de los dirigentes de máxima confianza de Rivera en su día.
En esta línea, la mayoría de dirigentes consultados de Ciudadanos, incluso próximos al propio Cantó, opinan que el actor ya habría llegado a un acuerdo con el secretario general del PP, Teodoro García Egea, quien ya contactó con él esta semana tal y como informó Valencia Plaza.
A partir de aquí, las conjeturas se disparan: algunos opinan que Cantó será llamado para incorporarse en la lista de Isabel Díaz Ayuso, mientras otros piensan que no irá en la candidatura pero apoyará visiblemente su campaña. Por otro lado, hay quien ve más factible que regrese a su trabajo como actor y productor y pase un tiempo en barbecho político antes de volver a irrumpir bajo, probablemente, las siglas del PP. En cualquier caso, casi nadie piensa que esto signifique un adiós de Cantó, sino simplemente un 'hasta luego'.