VILA-REAL. Compromís per Vila-real considera "injustificable" el pago de la puerta de una iglesia "sin ningún valor histórico" por parte del Ayuntamiento. El Grupo Municipal ha denunciado la aportación del equipo de gobierno, de 6.000 euros para sustituir un elemento que forma parte de un edificio privado perteneciente a la Iglesia, mientras que el Obispado de Segorbe-Castellón, como legítimo propietario, aporta -con el apoyo de la propia parroquia- 5.000 euros.
Desde Compromís per Vila-real apuntan que las subvenciones a los templos –y si estos no pertenecen al patrimonio histórico o han sido declarados Bien de Interés Cultural (BIC), como es el caso-, se derivarían del sostenimiento general de la Iglesia católica, según los acuerdos internacionales suscritos en el año 1979, más concretamente el Acuerdo entre el Estado español y la Santa Sede sobre asuntos económicos, firmado en Ciudad del Vaticano el 3 de enero de 1979. En este sentido, destacan que este Acuerdo, en su artículo II establece un sistema de contribución tributaria en el IRPF por el cual, el Estado destina al sostenimiento de la Iglesia católica el 0,7% de la cuota íntegra del IRPF correspondiente a los contribuyentes que así lo deseen.
“Cualquier otra subvención o transferencia pública de dinero para el sostenimiento de la Iglesia deberá estar apoyada en otra normativa y tomará la forma jurídica de entidades no eclesiásticas y, en ocasiones, se someterán a la concurrencia pública de subvenciones”, explican, al tiempo que señalan que “cabría una excepción, destinada al mantenimiento de los templos religiosos con un valor de patrimonio histórico –no es el caso- y se debería canalizar a través convenios con las comunidades autonómicas en base a la legislación de patrimonio histórico cultural”. “Diversos especialistas en el ámbito han alertado a Compromís de la dudosa justificación de esta aportación, por lo que se pide al equipo de gobierno que tome las medidas oportunas y revise dicho movimiento”, afirman.
Desde Compromís critican las palabras del coordinador del área de gobierno Pueblo, Xus Madrigal, que manifestó que esta iniciativa responde a que dicha parroquia es “muy activa y solidaria” y justifica esta aportación para el “mantenimiento” de la actividad solidaria “en condiciones de seguridad y para garantizar la correcta conservación del patrimonio”.
Desde Compromís per Vila-real consideran que el equipo de gobierno utiliza el sentimiento religioso de los ciudadanos para fines políticos, “lo cual nos parece, cuanto menos, poco ético, especialmente cuando todavía se debe dinero a ONG y entidades sin ánimo de lucro que también ayudan a las personas que más lo necesitan, entre otros entes locales”. Además, se preguntan si todas las confesiones religiosas existentes en la ciudad –desde evangélicas, hasta musulmanas, pasando por ortodoxas- van a tener el mismo trato cuando necesiten renovar alguno de los elementos físicos de sus sedes, en este caso, las puertas. “¿Qué justifica que se colabore en el cambio de la puerta de un edificio privado y no de otro, cuando además no tiene ningún valor histórico? ¿De verdad lo consideran patrimonio desde el Ayuntamiento?”, señalan desde Compromís, quienes añaden que, en ese caso, también puede contribuirse con cualquier otra asociación laica que sea solidaria con el prójimo o con un particular que sea dadivoso con sus vecinos.
“Estamos de acuerdo con el equipo de gobierno en que Vila-real es una ciudad referente, solidaria y dinámica, pero estamos en un momento en el que se está planteando subir el IBI por una mala situación económica. Será cuestión de empezar a mirar de qué gastos se puede prescindir para ahorrar a las arcas municipales un buen pellizco, en lugar de cargar sobre las espaldas de los contribuyentes todos los caprichos de quienes gobiernan”, concluyen desde el partido.