Hoy es 15 de diciembre

la comunitat valenciana se sitúa a la cola de españa en las pruebas de la covid

¿Dónde está la prevención? Sanidad hace seis veces menos test que en enero

12/04/2021 - 

VALÈNCIA. La situación de la Comunitat Valenciana respecto a la lucha contra el coronavirus ha mejorado notablemente en las últimas semanas hasta convertirse en la autonomía con la incidencia más baja de toda España. Según los datos de este lunes, la región se sitúa en 36,3 casos por cada 100.000 habitantes, muy por debajo de las siguientes Comunidades Autónomas (CCAA) en este particular ranking: Baleares (57,3), Murcia (67,7) y Galicia (75,3); mientras que la media estatal alcanza los 199 casos.

Ahora bien, pese a contar con un ritmo creciente de vacunación, la batalla todavía no está ganada. El principal lunar en la gestión sanitaria valenciana sigue siendo la prevención. Prueba de ello es que la Conselleria que dirige la socialista Ana Barceló ha bajado los brazos de forma alarmante en la realización de test para detectar la covid. En la última semana, entre el 2 y el 8 de abril, en la Comunitat se han realizado tan sólo 31.328 pruebas diagnósticas en total, 24.761 PCR y 6.567 test de antígenos, según datos del Ministerio de Sanidad.

La cifra es seis veces inferior a la capacidad diagnóstica que demostró la Comunitat Valenciana en los momentos más duros de la tercera ola. Durante la tercera semana de enero, con la incidencia desbocada en más de 1.400 casos, llegaron a realizarse más de 190.000 pruebas. Durante todo ese mes, Sanidad mantuvo un ritmo por encima de las 150.000 pruebas semanales.

Desde entonces, medidas como las restricciones a la movilidad y los encuentros sociales o el cierre de la hostelería han desplomado los contagios. Pero, si la Comunitat tiene capacidad esa diagnóstica, ¿por qué no la utiliza en los momentos de valle para evitar nuevas olas?.

Según explica la Conselleria de Sanidad a este periódico, el número de pruebas que se realiza actualmente obedece al descenso en el número de personas con síntomas y de los propios casos. Esta estrategia, no obstante, choca con lo defendido por no pocos epidemiólogos que, en los valles anteriores, han insistido en mantener alto el número de pruebas para detectar a enfermos asintomáticos.

Dicho de otra manera: con un porcentaje de inmunización todavía bajo por la falta de vacunas, la estrategia más eficaz para evitar una nueva ola sería continuar realizando muchas pruebas y que la mayoría fuera negativas. Esto es, un elevado número de pruebas con una baja positividad.

Incidencia baja con más pruebas

La explicación de que, al existir menos positivos, se producen menos casos no parece por tanto óptima si se observa desde el prisma de la prevención. Es más, todas las CCAA que se mantienen en una incidencia baja están haciendo mayor número de pruebas en proporción a su población que la Comunitat Valenciana.

De hecho, algunas de estas regiones incluso, ostentan una tasa de positividad menor que la valenciana, lo que indica un mayor nivel de seguridad dado que reafirma que la incidencia de casos que marcan está, posiblemente, más aproximada a la realidad que la de la Comunitat.

Es el caso de Baleares y Galicia, que se sitúan en una tasa de incidencia de 57 y 75 respectivamente, pero vienen realizando cuatro y tres veces más test que la Comunitat Valenciana. Así, Baleares marca una tasa de 2.226 test por cada 100.000 habitantes, mientras que Galicia alcanza en este indicador 1.812 pruebas, ambos muy superiores respecto a la región valenciana, que ocupa el último puesto de España con 626. La media nacional se encuentra en 1.497, casi tres veces más de los test que realiza la Comunitat Valenciana.

Además, se da la circunstancia que la tasa de positividad de Baleares y Galicia es, respectivamente, de 2,15% y de 2,48%, lo que significa que disponen de mayor seguridad respecto a los números de pandemia que manejan que la Comunitat Valenciana, con un índice de positividad del 3,57%. Es decir, en esas CCAA se han muchos más test y recogen, proporcionalmente, menos casos positivos, mientras que la Comunitat Valenciana hace menos pruebas y, estadísticamente, detecta más contagios. 

Una fotografía que deja la incógnita de cuánto podría ascender la incidencia acumulada valenciana -es decir, la tasa de positivos- si la Conselleria de Sanidad se empleara a fondo para equipararse a la media nacional en número de pruebas. Aunque, a priori, no debería suponer un ascenso demasiado pronunciado -el resto de indicadores como las hospitalizaciones son relativamente buenos- sí contribuiría a disponer de datos más pegados a la realidad.

La consellera de Sanidad, Ana Barceló. Foto: EFE

En este sentido, o las labores de rastreo no están siendo tan exhaustivas como deberían, o se está desaprovechando la ocasión de realizar pruebas preventivas en colectivos sensibles. En definitiva, la Generalitat no está utilizando la capacidad adquirida de poder realizar casi 200.000 test a la semana para asegurar la prevención.

En cambio, el modelo de la Conselleria de Sanidad parece asemejarse más al de la Región de Murcia, la segunda con peor tasa de pruebas (750), que goza de la tercera incidencia más baja de España (67,7) pero con una tasa de positividad del 5,12%, lo que apunta a que podría existir un número reseñable de contagios no detectados.

Noticias relacionadas

next