El conseller de Economía, Rafa Climent, junto al subsecretario, Natxo Costa. Foto: KIKE TABERNERVALÈNCIA. La Conselleria de Economía que dirige Rafa Climent remitió este viernes a la Conselleria de Justicia y Función Pública de Gabriela Bravo su programa piloto de teletrabajo para que sus funcionarios puedan trabajar a distancia hasta tres días a la semana. Un plan al que las principales organizaciones sindicales presentaron alegaciones esta semana y que ha obtenido el visto bueno de todas ellas a excepción de CCOO-PV.
La intención ahora del departamento de Economía es que Función Pública dé el visto bueno a este plan para que pueda ponerse en marcha. De esta manera, tendría vigencia hasta que se determinase el fin de la crisis sanitaria producida por la covid-19. Esto es porque la Conselleria de Climent pretendía hacer este plan utilizando como referencia el Decreto 82/2016 del Consell por el que se regula la prestación de servicios en régimen de teletrabajo del personal empleado público de la Administración de la Generalitat.
Sin embargo, la experiencia durante la pandemia ha puesto de manifiesto que esta normativa requiere una profunda revisión porque se encuentra desactualizada. Con estos mimbres, el documento elaborado por la cartera de Climent ahora es en cierto modo transitorio, ya que da respuesta a la situación actual y, más adelante, cuando la Conselleria de Bravo elabore un nuevo decreto de teletrabajo, la intención es acogerse a él.
El programa piloto desarrollado por Economía y que sería el primero en tratar de adaptarse al decreto de teletrabajo del primer Consell del Botànic incluye un anexo con todos los puestos de trabajo al que se le aplicará la modalidad de trabajo a distancia. Sin embargo, el documento matiza que al ser de carácter voluntario, todo aquel que prefiera trabajar de manera presencial, podrá renunciar al teletrabajo mediante un escrito dirigido a la subsecretaría de la Conselleria de Economía.
Asimismo, tendrán prioridad para teletrabajar los empleados públicos que pertenezcan a colectivos con diversidad funcional, los que tengan a su cargo menores de hasta 13 años, "o bien mayores o dependientes, con la finalidad de posibilitar la conciliación de la vida personal, laboral y familiar". También gozarán de preferencia las personas que las autoridades sanitarias consideren en cada momento como "grupo vulnerable o con especial sensibilidad en relación a la covid-19".
En total, los funcionarios podrían teletrabajar con este programa piloto un total de tres jornadas laborales a la semana, por lo que el número de días "de modalidad presencial semanal en el centro de trabajo no podrá ser inferior a dos". Y, aunque trabajen desde casa, habrán de respetar los horarios habituales que prestan en su puesto de trabajo, por lo que será obligatorio fichar con el sistema gvCronos tanto los días que acudan a la Conselleria como los que trabajen desde su domicilio.
Ahora bien, en caso de que la crisis sanitaria empeore, los funcionarios podrían trabajar a distancia "la totalidad de días de la semana, o bien, si las circunstancias lo permiten, cuatro días de la misma". Así, será la persona responsable de cada servicio o unidad la encargada de diseñar unos turnos "y rotaciones que sean necesarios entre el personal a su cargo".
Por otra parte, este programa piloto también contempla que si por necesidades de urgencia se requiere la presencia de algún trabajador en su puesto de trabajo un día que en el que éste tuviera que teletrabajar, deberán avisarle con una antelación mínima de 24 horas. Además, se realizará formación telemática al personal para que dispongan "de los conocimientos necesarios sobre prevención de riesgos laborales en esta modalidad de trabajo".
Mientras la Conselleria de Economía espera la luz verde de Función Pública para poder aplicar este plan de teletrabajo, el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) ya ha puesto en marcha el programa de teletrabajo. El motivo no es otro que al tratarse de una empresa pública, no depende de Función Pública, por lo que no necesita el visto bueno de la Conselleria de Gabriela Bravo para implantar el teletrabajo tres días a la semana entre sus empleados.
