El Banco Sabadell estudia poner a la venta 1.000 millones en hipotecas dudosas pero sin prisas

ALICANTE. El Banco Sabadell ha reducido drásticamente su exposición al ladrillo en los últimos meses, hasta el punto de que desde 2016 ha sacado de su balance 17.000 millones de euros en activos tóxicos, que ahora están en manos de fondos de inversión y firmas especialistas en recobros. No obstante, aún queda algo de 'grasa' que puede quitarse de encima, y por este motivo la entidad que preside Josep Oliu ha comenzado a sondear el mercado, con la intención de colocar una cartera de 1.000 millones de euros en hipotecas morosas.

Sin embargo, la entidad con sede en Alicante no tiene tanta urgencia como hace unos años por librarse de este tipo de activos, por lo que el sondeo de mercado que acaba de encargar solo cristalizará en una venta si llega una oferta realmente interesante para el banco. El Sabadell, así, está dispuesto a descartar todas aquellas potenciales pujas que signifiquen un descuento por debajo de lo que considere aceptable. El sondeo de mercado, adelantado este jueves por el diario El Confidencial y confirmado a Plaza por fuentes conocedoras de la operación, ha sido encargado a la consultora EY.

Se trata de un primer sondeo de mercado con el objetivo de lanzar a la venta la citada cartera de préstamos hipotecarios morosos, con el que la entidad presidida por Oliu pretende pulsar la existencia de apetito por parte de los fondos de inversión, habitualmente internacionales, a los que ha venido traspasando activos tóxicos en los últimos años, en un momento en el que la crisis del coronavirus y sus consecuencias económicas han aumentado la incertidumbre sobre estos préstamos y la inestabilidad.

En caso de que se concrete el interés en las próximas semanas, el Banco Sabadell lanzaría formalmente a la venta de esta cartera. En cualquier caso, el banco no tendría una necesidad imperiosa en deshacerse de estos préstamos, tal como explican las fuentes citadas, por lo que el mandato contempla ser selectivos con las ofertas y dar marcha atrás en caso de que los descuentos propuestos sean superiores a los deseados.