CASTELLÓ. Las ocho incorporaciones que ha realizado el Castellón de cara a la próxima temporada y las que aún están por llegar obligan al club albinegro a desprenderse de varias fichas para no sobrepasar el tope de 25 jugadores permitidos en Segunda División.
El primer equipo albinegro cuenta ahora con 27 futbolistas, incluidos los que regresaron en agosto tras cumplir cesiones en otros destinos. Son dos más de los que permite la normativa, por lo que el club orellut tendrá que encontrar acomodo para algunos de ellos. La cifra exacta dependerá de lo que fiche el Castellón de aquí al final del mercado.
Por lo pronto, un portero tiene que llegar sí o sí, ya que el técnico, Óscar Cano, tan solo dispone de Álvaro Campos para cubrir ese puesto. No será el único objetivo del club, ya que se pretenden reforzar "tres o cuatro posiciones", según reveló el técnico este miércoles en Radio Voramar.
Con estas incorporaciones futuras, el Castellón se vería en la necesidad de tramitar cinco o seis bajas.
Entre los jugadores con más opciones de salir figuran los que menos minutos están contando en esta pretemporada. Así, cabe recordar la ausencia de Iñigo Muñoz en la lista de convocados frente al Mallorca, en un claro gesto de invitación a salir. En ese partido tampoco participaron el extremo Alfredo Gutiérrez y el defensa Paco Regalón, que sí estuvieron citados. El extremo catalán tan solo ha jugado el partido frente al Valencia, mientras que el central andaluz no ha participado en ninguno de los amistosos.
Por otra parte, el club tendrá que decidir si cuenta o no con los futbolistas que se han reincorporado al trabajo tras jugar cedidos en otros equipos. En esta situación se encuentran el delantero Jairo Cárcaba, que no ha tenido minutos en los dos últimos amistosos del Castellón, y el central Carlos Delgado, que sí ha participado en los tres partidos de preparación.