CASTELLÓ. (EP). El Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Millars, formado por los ayuntamientos de Burriana, Almassora, Vila-real, la Diputación de Castellón y la Generalitat Valenciana, se ha marcado como un objetivo "importante" de esta primavera y verano de 2019 preservar los nidos del chorlitejo chico (Charadrius dubius) del paraje durante la época de cría.
El Servicio de Mantenimiento del Consorcio del Millars y la Guardería rural han instalado y renovado 8 carteles informativos a lo largo de 3 kilómetros de costa para avisar a los usuarios de la playa de la presencia de los chorlitejos chicos. Los carteles informativos se han clavado entre la arena y las piedras de la playa a una distancia aproximada de unos 50 metros cada uno.
El primer cartel ubicado al norte está puesto en al acceso de la playa sur de Almassora para que los bañistas y otros usuarios puedan verlos enseguida. El cartel instalado más al sur, en el término de Burriana, se encuentra ubicado en el acceso de la playa de la Gola.
La guardería rural, después de los censos que realiza anualmente de la especie, indica los lugares exactos donde deben ir clavadas las pancartas informativas que suelen coincidir con los lugares aproximados donde años atrás han criado los chorlitejos chicos.
Concretamente son espacios que mezclan piedras, grava y arena de la playa. El último censo de chorlitejos chicos realizado por la guardería rural y los técnicos de la Desembocadura del Millars en la playa de las Golas de la desembocadura, entre los términos municipales de Burriana y Almassora, obtuvo un resultado de cuatro ejemplares.
El chorlitejo chico inicia el período de reproducción en el mes de abril y lo alarga hasta septiembre, aunque la mayoría de parejas eligen el mes de junio para poner los huevos, incubar y criar los polluelos. Esta especie de pequeño limícola elige zonas abiertas de playa que mezclan piedras con grava y arena para fabricar el nido. También suele utilizar orillas arenosas de márgenes de ríos y de lagos.
Los chorlitejos chicos fabrican una pequeña concavidad rodeada por materia vegetal y pequeñas piedras. La hembra suele poner cuatro huevos que pasan bastante desapercibidos y camuflados con el entorno. La incubación de los huevos suele durar unos 25 días. El hecho de que inicien la reproducción en junio entra en "conflicto" con el uso que hacen cientos de bañistas de la playa, según ha explicado el Consorcio en un comunicado.
Según la Sociedad Española de Ornitología, SEO-Birdlife, la amenaza más importante que sufre esta limícola es la alteración y eliminación del hábitat. También hay que añadir como causa destacada las molestias provocadas por los usuarios de las playas que acceden a cualquier lugar de la misma.
La depredación provocada por ratas, perros, zorros y jabalíes también altera la población de cholitejos chicos. En la actualidad esta ave es considerada como de interés especial en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.