VALÈNCIA. El Puerto de València se plantea hasta cinco alternativas diferentes para resolver su futuro acceso norte. Dos de ellas serían mediante túnel terrestre, bien bajo la trama urbana ejecutado con tuneladora o bien bajo el paseo marítimo. Las opciones restantes se ejecutarían por el mar, con un viaducto reservado al tráfico portuario o mediante túneles sumergidos, bien realizados con tuneladora o sumergido con estructuras prefabricadas.
Así consta en el encargo que la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha realizado a Ineco, entidad dependiente del Ministerio de Fomento, para que realice el estudio informativo de las diferentes alternativas.
En la primera fase de ese estudio, en la que se realizará un diagnóstico de la situación actual del área afectada con el fin de obtener los posibles corredores, la consultora tecnológica debe finalmente estudiar tanto la opción viaria para camiones como la ferroviaria, tal y como pedían tanto el Ayuntamiento de València como la Generalitat.
No obstante, la opción ferroviaria solo se contempla para esta primera fase de diagnóstico. La segunda de las tres fases en las que se estructura el análisis, que analizará las alternativas preseleccionadas para establecer el impacto ambiental, residual, su funcionalidad y sus costes, quedaría reservada en principio a alternativas solo para camión, bien mediante túnel bajo el mar con tuneladora o con túneles terrestres.
Según figura en los requisitos fijados por la APV, el túnel urbano con tuneladora tendría dos tubos, uno por sentido de circulación, y doble carril en cada tubo.
Las alternativas sobre las que debe trabajar Ineco comienzan en la carretera A-21, a la altura del barranco de Carraixet y terminan en el Muelle de Levante del Puerto de València.
Para cada alternativa se describirán los terrenos atravesados y se realizará una descripción de los posibles problemas geotécnicos de cimentación de las estructuras, excavaciones temporales o definitivas, viabilidad constructiva de túneles en mina, aprovechamiento de materiales, canteras, etcétera.
A efectos de determinar si el acceso para camiones debe ser objeto de una evaluación ambiental ordinaria o simplificada –con la consiguiente diferencia de plazos de tramitación–, la APV sostiene que el acceso viario no se puede considerar estrictamente una autovía pese a que serán dos calzadas con dos carriles por sentido a desarrollar en las posibles soluciones en túnel.
El estudio informativo para definir el trazado "más adecuado" para el acceso norte, incluida la posibilidad de que permita también el tráfico ferroviario, se basará en un análisis previo de las ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones, asegura la APV. La entidad que preside Aurelio Martínez prevé destinar 770.196 euros en este encargo a Ineco en calidad de medio propio.
Según sostiene el Puerto, la "necesidad" del acceso norte al puerto de Valencia se hace patente al analizar las opciones que actualmente tiene cualquier vehículo que pretenda acceder al recinto desde el norte, como los que proceden del Puerto de Sagunto.
Actualmente, los vehículos ligeros pueden hacerlo atravesando la ciudad hasta la Avenida del Puerto o por el by-pass hasta enlazar con la V30, una vía en la que es necesario recorrer aproximadamente 40 kilómetros hasta llegar al acceso sur, el único del que dispone el Puerto de València actualmente.
Para los camiones sólo existe esta segunda posibilidad, lo que en los últimos años ha provocado un "aumento significativo" del número de vehículos hasta desembocar en su "saturación", defiende la APV. Entre las razones que la entidad exhibe para justificar la necesidad del nuevo acceso norte figura de hecho el ahorro en emisiones de CO2 derivado de evitar tener que dar ese rodeo por la V30 para llegar al acceso sur.
La inclusión de la variable ferroviaria dentro de las opciones a analizar responde a la exigencia del alcalde de València, Joan Ribó, quien desde hace meses señala que el acceso por tren es "el único" viable". A su juicio, "no tendría sentido hacer un túnel para camiones" cuando desde el Gobierno central se habla "de descarbonizar la sociedad española y eliminar las emisiones en 2050".
Por su parte, la Generalitat, a través del conseller de Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, también se mostró posteriormente a favor de que el estudio de Ineco incluyera también un diagnóstico de las ventajas e inconvenientes del acceso por tren.