CASTELLÓN. La corrección que lleva acumulada el precio del barril de petróleo desde septiembre del recién terminado 2018 recuerda bastante a la sufrida en el año 2014, cuando el precio se despeñó desde los 107 dólares por barril hasta los 43 dólares en un primer impulso. En este caso, la corrección parece que ha terminado en los 42 dólares donde también frenó en una corrección anterior de grado menor.
Es por ello que ha llegado el momento de pensar que es muy probable que dichos precios queden como mínimos y con ello hayamos visto el suelo. Para estar seguros de ello, solo resta confirmar el nacimiento de una pauta de mínimos crecientes que quede confirmada también con nuevos máximos crecientes.
Según podemos ver en el siguiente gráfico, el precio del petróleo actualmente está encontrando dificultades para colocarse por encima de los 53 dólares. Este pequeño problema junto con la resistencia a batir de los 55 dólares es la señal inequívoca de que se habrá hecho suelo de mercado.
Fuente: Metatrader 4.0 de Activtrades
No obstante, no podemos olvidar que las correcciones de finales del año pasado en el precio del petróleo vienen a indicar que la economía mundial se desacelera. Un escenario económico que se está acreditando con datos mes a mes. Por ello, desde el punto de vista fundamental no podemos sacar la conclusión de que haya pasado lo peor.
Por parte del análisis técnico, deberíamos fijarnos en los 55,50 dólares como primera resistencia a batir por ser el 38,2% de la corrección previa. Luego tendríamos la clave de la recuperación a largo plazo si alcanzados los 60 dólares, que representan la mitad de la bajada previa y el testeo a la directriz alcista rota en el pasado mes de noviembre.
Un fracaso y giro a la baja ante dicha zona sería dejar un nuevo máximo decreciente y con ello el riesgo de irse a marcar nuevos mínimos por debajo de los 42 dólares, agudizando con ello la tendencia bajista de largo plazo.
Eduardo Bolinches es director de Bolsacash