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entrevista con vicent botti, experto en inteligencia artificial 

"Esta crisis ha demostrado que es necesario un sistema público de gestión de datos"

14/04/2020 - 

VALÈNCIA.  Vicent Botti Navarro es catedrático del Departamento de Sistemas Informáticos y Computación y director del Instituto Valenciano de Investigación en Inteligencia Artificial (VRAIN) de la UPV. Forma parte del grupo de expertos que seleccionó la Generalitat Valenciana para la elaboración de la Estrategia de Inteligencia Artificial. En esta conversación con Plaza, Botti ofrece detalles qué puede aportar la IA, qué ha hecho Nuria Oliver y cuál es su propia propuesta, basada en conocer la trazabilidad de las personas contagiadas o con riesgo de contagio a través de su teléfono móvil.

¿Qué papel juega usted dentro del grupo de expertos que asesoran a la Generalitat Valenciana en materia de Inteligencia Artificial?

-La Generalitat nos convocó a un grupo de expertos para ese objetivo. Constituimos dos grupos de trabajo, pero nos pilló la pandemia y de esa primera reunión poco hemos podido hablar. A su vez, la Conselleria de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital nos convocó para otra iniciativa, que es la que lidera Nuria Oliver, por si este grupo de expertos quería colaborar. Inicialmente, casi todos estuvimos de acuerdo, aportamos gente de nuestros centros de investigación y hubo una primera reunión, el 27 de marzo. Lo que pasó es que en los objetivos que se plantearon en esa reunión, muchos expertos no hemos podido ayudar porque requería una dedicación del 100% y algunos estamos ahora impartiendo docencia online. Lo que se pedía más en ese proyecto era más mano de obra; es decir, gente con capacidad para programar, y no tanto que aportara ideas. Por eso, gran parte del grupo de expertos no hemos colaborado en esa iniciativa. Estamos desarrollando otras cosas, y todos nos hemos ofrecido al Gobierno valenciano para intentar ayudar con alternativas distintas a las que está llevando a cabo el grupo de Nuria Oliver.

-¿Cuáles son esas alternativas?

-Hemos presentado varias propuestas a la Agencia Valenciana de la Innovación, aunque somos conscientes de que ahora son más prioritarias otras propuestas más prioritarias como fabricar test de prueba, respiradores, guantes o mascarillas. Pero estamos por colaborar y aportar los recursos que tenemos.

-¿Hasta qué punto es importante conocer los datos de movilidad?

-Ese estudio tiene un nivel de abstracción muy alto, pues se dispone de información por áreas geográficas de 5.000-50.000 habitantes. Son estudios que permitirán, sobre todo, a posteriori, cuando se disponga de toda la información, analizar las medidas que se han adoptado y cómo ha afectado a la movilidad, y de forma muy agregada.

Hay que tener en cuenta en este proceso que hay tres fases: la fase previa; durante y después de la pandemia. En la fase previa es importante disponer de test de prueba y de la información sanitaria para combatir el virus. En esta fase, sí que importante detectar a través de las redes sociales sí se está produciendo un brote. Es el caso de la empresa canadiense Bludot, que previó el brote de Covid-19 en Wuhan. Se dedican a analizar información que hay en redes sociales y aplican técnicas de procesamiento de lenguaje natural para detectarlo.

Después estaría el trabajo que está haciendo Nuria Oliver. Y es también lo que ha publicado Google a nivel mundial, y con información de todas las regiones: en función de cómo se comporta la gente, pueden saber si las medidas que ha adoptado el Gobierno, bien central bien autonómico, han afectado a la movilidad. En este caso, sí que sería conveniente disponer de los datos para poder aplicar técnicas de ciencia de datos y aprendizaje automático para aprender de ellas y saber qué ha pasado, no sólo con la movilidad, también con otras variables. Esto nos puede servir en futuro y saber qué estrategias y decisiones hay que adoptar cuando se producen situaciones similares. Puede ayudar muchos a los expertos sanitarios en un futuro, insisto.

-Y a todo esto, ¿en qué puede ayudar la Inteligencia Artificial?

-Sobre todo en la fase del durante, y en dos cuestiones. Posiblemente, haya más, pero personalmente destacaría dos. El uso de las técnicas de optimización de la IA, de forma que los hospitales estén ocupados de una forma óptima; para hacer un mejor uso de los recursos humanos, y los materiales, o que las mascarillas lleguen en el momento que son más necesarias…Teniendo información, se pueden optimizar mejor los recursos. La segunda sería tener acceso a los datos. El gran problema es que no tenemos un sistema público de gestión de datos. Y sería conveniente tenerlo y aprender de esta crisis. Me consta que a nivel de la Comunitat Valenciana ya se están tomando iniciativas para desarrollo un sistema público de gestión de datos.

-¿Por qué no se ha hecho hasta ahora, qué inconvenientes ha tenido?

-Pues el problema que tenemos ahora es no que podemos acceder a esos datos, ni tampoco a los datos de los operadores de telefonía móvil a un nivel de detalle adecuado. Tampoco a las bases de datos de los hospitales. La ley de Protección de Datos lo impide. Por eso, tenemos que aprender de esta lección y prepararnos para que los datos del sistema público estén a disposición de la ciencia para cuando haga falta, para investigar, y para casos de emergencia, como éste, todavía más. Insisto, es muy importante desarrollar un sistema público de gestión de datos, con todas las garantías de privacidad, pero facilitando el acceso a la gente que puede aportar soluciones e investigar.

-¿Y cómo se puede hacer? ¿cuál es su propuesta?

-La Inteligencia Artificial puede ayudar si tenemos información de la población a través de su teléfono móvil. Si todo el mundo permite que la información de la trazabilidad de su móvil, en el grado adecuado, esté en el sistema público, custodiado por la autoridad pública, que en este caso debería ser la autoridad sanitaria, podemos saber a través de la tecnología por dónde te has desplazado. De esta manera, cuando se detecta un contagio, con el teléfono móvil de esa persona la tecnología ya puede detectar por dónde se ha movido. En nuestro caso, la Universidad Politécnica de València ya dispone de la herramienta Utool, que permitiría ver la intersección de la trazabilidad, en este caso, del contagiado, cómo se ha movido en las últimas semanas, respecto a otros teléfonos móviles de los que también se dispone de esa información. Después los expertos sanitarios ya definirán, en función de las distancias, qué riegos de contagio se han generado en función de cómo se ha relacionado el contagiado en cuestión. Eso lo permite la Inteligencia Artificial, en este caso, a través de la herramienta Utool, de la que en la UPV ya disponemos de un primer prototipo, que ahora estamos comprobando mediante millones de tuits geolocalizados. Con los algoritmos que hemos desarrollado, hemos comprobado que la predicción de riesgo de contagio funciona. Este trabajo se hace por áreas, o por distritos postales, y se pueden identificar que personas están en riesgo de contagio. Con esta información, el sistema de salud puede contactar con esas personas y adoptar las medidas que considere conveniente. La IA lo que puede hacer es detectar las personas que han estado cerca y en un intervalo de tiempo adecuado.

-¿Cómo se pueden tener las información de los teléfonos móviles?

-Hay dos maneras. Una es colaborativa, a través de una app, que el usuario se descarga y se instala, y que permite conocer los movimientos de los ciudadanos durante un periodo de tiempo. Esa información puede ofrecer información adicional como muchas de las que se están anunciando estos días. Esa aplicación puede ofrecer información muy precisa con otros móviles que también la tienen instalada.

La otra información es la que disponen las compañías telefónicas. En ambos casos, se abordarían estos datos de manera anónima para garantizar la privacidad de la gente. Entiendo que esto genera dudas sobre la privacidad, pero la propuesta que hacemos es que lo datos deben estar en manos y custodiado por la autoridad pública, no por ninguna empresa. Reitero, que la autoridad sanitaria sería la adecuada. Además, la autoridad sanitaria es también la que dispone de los expedientes médicos.

En una situación de emergencia, como la que nos encontramos, debemos ser pragmáticos. En Suecia, por ejemplo, si planteas este sistema, el 99% de la población, se descargará e instalará la app. En España, posiblemente no se llegue a tanto, pero un porcentaje muy alto lo haría. Hay que tener en cuenta de que esa aplicación también tiene contraprestaciones para el usuario: le aporta seguridad y le aísla ante un posible contagio. Y en el caso de que estés contagiado, ayuda a que otro no lo hagan. Son dos razones de peso, con todas las garantías de privacidad, para que la gente colabore. También hemos consultados a expertos en protección de datos y nos dicen que este sistema es viable.

-¿Por qué la Comunitat Valenciana no tiene una app de estas características?

-Con estas características, no la tiene nadie. Recientemente, se ha lanzado una app que aporta información. Es una especie de chatbot, y en caso de cómo interactuas, te redirigen al sistema de salud. Sólo los casos de Noruega, Singapur y Corea del Sur se trata de modelos de aplicaciones más colaborativas. En Europa sí que se han confeccionado algunas aplicaciones, por parte de checos y alemanes. En nuestro caso, lo propusimos el pasado 17 de marzo.

-Después de todo lo sucedido, ¿crees que las autoridades son conscientes de la necesidad de un sistema público de gestión de datos?

-Si, me consta de que la Agencia Valenciana de la Innovación ya está trabajando en ello.

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