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grand place / OPINIÓN

Gen hla-drb1-04-01

Foto: ESA
15/06/2021 - 

Identifican evidencias de resistencia genética en el gen hla-drb1-04-01, responsable de que muchos contagiados sean asintomáticos”. El descubrimiento se produjo al mismo tiempo que el gobierno de la Unión hacia pública la obligatoriedad del primer certificado digital para el control de la libre circulación. La noticia es antigua, pero aún se puede encontrar en las hemerotecas digitales, si se busca en el caché borrado del internet primigenio, antes de que cayera LaRed, antes de que llegara ELLA. Fue el inicio de la peor guerra entre LasPharm y LasTech, en cuyas manos estaba la identificación de los usuarios del eHealthPassport, cuyos datos antaño controlaban los gobiernos delegados por los ciudadanos -se les llamaba “democráticos”-. 

Me llevó a ella la SIM de la Tieta, con toda la información previa a ElCaos. Fue una lucha por la supervivencia de LosOtros. Muchos de los que pasaron al OtroLado eran asintomáticos o bien no se habían contagiado. La Tieta fue uno de ellos. Tras el primer confinamiento de la pandemia, comenzó a viajar ininterrumpidamente por las zonas más peligrosas del Territorio-Europa. De la ZonaZero-VLC a la ZonaZero-BXL, todo el mapa estaba pintado de rojo, lo que significaba que era una zona de alta incidencia de la covid-19. Habían pasado dos años y aún no le habían cambiado el nombre a un virus que seguía mutando peligrosamente. Inexplicablemente, no se contagió. Sus continuos tests covid daban negativo, una y otra vez…

Hasta que llegó la vacuna y, con ella el pasaporte digital covid, que permitía la libre circulación por la Unión. Mientras tanto, algunos países comenzaban a levantar restricciones e incluso relajaban el uso de la mascarilla. Fue en el segundo verano de la pandemia. La identificación del gen resistente al virus movilizó a la comunidad científica y, con ella, a los gobiernos. Había comenzado la caza.

Aquellos ciudadanos que habían resistido a la pandemia, y cuyos datos estaban completamente codificados en un código QR primario que recogía todo su historial de tests, fueron detectados y contactados para colaborar como experimento genético. Era por el bien de la humanidad. ¿Quién se podía negar?

-¿Estás seguro David? ¿Te ha llegado el código para poder volar? Creo que han cerrado el espacio aéreo temporalmente con el Territorio-Este.

La respuesta no llegó. Laura no estaba convencida de que su chip funcionara correctamente. Últimamente los contactos con David eran más esporádicos y menos seguros. Ambos eran de la generación previa a a vacuna post-natal, que llegó en 2022. Al nacer en el AñoUno d.C., aún no se había implantado ni siquiera en niños. Mientras tanto, la mayor vacunación de la población mundial en toda la historia de la humanidad seguía su curso. En ello pensaba, cuando se topó con un adolescente de media melena sentado en la terraza. ”LongLeg”, pensó para sí misma. El chico, que no superaría los 16 años, era extraordinariamente alto, lo que se acentuaba con su extrema delgadez. “¿Cuánto mides?”, le inquirió Laura. “Supero el 1,94”, respondió el chico con una media sonrisa que se adivinaba a través del brillo de sus ojos.

Más que su altura, lo curioso era su presencia en un espacio público. Los adolescentes no salen a la calle desde la revuelta de 2050, capitaneada por un grupo disidente imberbe. Podían exponerse al virus y contagiarlo, fue la excusa. Desde el principio de la covid, los jóvenes fueron estigmatizados. Se reunían en grupo y se contagiaban unos a otros sin saberlo, debido a que eran asintomáticos, provocando enfermedad y muerte a su paso, en especial, entre sus familias.

Hoy están perimetrados en todas sus actividades, incluso para sus padres, que sólo pueden verlos crecer online. Desde el uso masivo del holograma, esto ya no es tan traumáticos, en especial para los progenitores-criadores. El chico se levanta y camina lánguidamente hacia el panel de la entrada, como suelen andar los adolescentes, a cámara lenta. Ha llegado su turno. Sube a un dron biplaza vacío y se despide con la mano. Se dirige, por el color del aparato, al control genético periódico a que les someten para garantizar que son portadores del gen recesivo del virus. Le usaran para multiplicar la especie. Es uno de los elegidos…

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