Bonig enfada a Génova con el debate sobre Orihuela y colma la paciencia de Casado
Bonig enfada a Génova con el debate sobre Orihuela y colma la paciencia de Casado
ALICANTE. El desafío de Isabel Bonig a cuenta de que el candidato de Orihuela lo iba a nombrar el PPCV -algo que es obvio, pero que sentó muy mal en Génova- ha surtido a efecto: Bonig ha rebajado la tensión a sabiendas de dos cosas: de que si mantenía el pulso tenía todas las de perder y que ha logrado que sea llamada a consultadas a la sede de Génova con el objetivo, claro está, de ratificar al oriolano Emilio Bascuñana como candidato y, al mismo tiempo, quien sabe, si negociar otros futuros cargos que estén en el aire y que se designen en los próximos días -listas autonómicas- o después de las elecciones autonómicas y municipales. En los entornos ya se da por hecho que Bonig no tendrá más remedio que aceptar que el alcalde de Orihuela repita, pese a que la vicesecretaria general, Eva Ortiz, ha trabajado en buscar candidatos alternativos-
Este jueves, ha visitado la Vega Baja, la zona cero del conflicto entre el PPCV y Génova, y allí ha hecho una declaraciones para rebajar la tensión. "El candidato de Génova se consensuará con la dirección nacional del PP", ha dicho, pero es obvio que algo ha pasado entre Bonig y la dirección del PP en Madrid para que ahora se rebaja la tensión: y es que Bonig sabe que tiene las de perder si se empecina en descabalgar al actual alcalde de Orihuela, que tiene el respaldo tácito de Pablo Casado y de toda su dirección.
Y según ha podido saber Castellón Plaza, Bonig se reunirá la semana que vienen en Madrid con la dirección del PP y allí se podrán las cartas sobre la mesa: lo más probable es que tenga que asumir que Bascuñana sea el candidato -pese el informe sobre las supuestas irregularidades en su etapa como asesor de Sanidad- y a cambio, podrán colocar peones suyos en candidaturas o en futuros puestos que se elijan tras las elecciones locales y autonómicas. Pero el encontronazo ha existido, las diferencias son salvables, en tanto en cuanto sabe que debe aceptar al alcalde de Orihuela como candidatura y lo que se intenta ahora es rebajar la tensión. Si hay acuerdo, es posible que el PPCV ratifique la semana que viene mismo a Emilio Bascuñana.
Bonig enfada a Génova con el debate sobre Orihuela y colma la paciencia de Casado