VALÈNCIA. (EP). El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha insistido este lunes en rueda prensa en que su formación entre en un Gobierno de coalición con Pedro Sánchez e incluso crear un bloque de gobernabilidad en todos los niveles, comunidades autónomas y ayuntamientos, pese a reconocer los malos resultados obtenidos en las elecciones europeas, locales y autonómicas de ayer.
Iglesias ha admitido que los resultados electorales han sido "malos" y que suponen "un retroceso" con respecto a las generales de hace un mes. Así, ha apuntado no están contentos y que toca hacer autocrítica, pero a la vez ha matizado que continúan teniendo un "enorme peso estratégico" para construir gobiernos del bloque progresista tanto a nivel estatal, autonómico y local.
En una breve rueda de prensa, Iglesias ha anunciado además que convocará en las próximas semanas un nuevo Consejo Ciudadano Estatal para evaluar los resultados y ha incidido en que la división de la izquierda tanto en el Ayuntamiento de Madrid como en la Comunidad de Madrid "resta".
"A la izquierda no nos funciona cuando nos dividimos y cuando nos peleamos. Todos tendremos que hacer autocrítica y saber que la división resta", ha señalado al ser preguntado por los resultados de Íñigo Errejón en la comunidad.
Tras reconocer la debacle electoral "sin paños calientes" ha puntualizado que afrontarán la negociación con Sánchez desde la "modestia" que les dan los 3,7 millones de votos obtenidos en las generales. "Somos conscientes de que no vamos a poder pedir muchos elementos que nos gustaría llevar a la práctica (...), pero hay que tratar de ayudar a construir un gobierno de coalición que pueda proteger los derechos sociales y en el que podamos estar en la proporción modesta que nos corresponde", ha indicado.
En este sentido, ha explicado que la formación morada también jugará su papel para lograr revalidar o conseguir gobiernos progresistas en territorios como Baleares, Canarias, Comunidad Valenciana o La Rioja. "Eso puede ocurrir en muchos ayuntamientos también", ha apuntado.
Iglesias, que hasta en dos ocasiones ha recalcado que su cargo está siempre a disposición de lo que decidan los inscritos del partido, ha analizado la debacle del bloque progresista en Madrid, donde Manuela Carmena ha perdido el ayuntamiento y no han logrado desbancar al PP de la presidencia de la comunidad.
A su juicio, la formación fue "enormemente responsable" al no presentar candidatura para el ayuntamiento que compitiera con Más Madrid y actuaron éticamente al pedir el voto tanto para la alcaldesa como para la propuesta electoral de Carlos Sánchez Mato. "Siempre pensé que ambas debían estar en el ayuntamiento", ha indiciado, para luego lamentar que incluso sumando los votos de ambas formaciones "no hubiera sido suficiente".
Entonces, Iglesias ha incidido en que "todos" deben hacer autocrítica, para luego enfatizar que a la izquierda "no le funciona" cuando se divide y cuando se pelea.
Ahora, añade, toca felicitar al PSOE por sus buenos resultados, aunque ha lamentado que el empuje de los socialistas no haya sido suficiente para que su candidato Gabilondo recuperara la comunidad. Iglesias, en clave nacional ha recordado que si en Madrid la derecha "se va a unir" sería un error "gravísismo" si los progresistas no fueran "responsables para ponerse de acuerdo".
"Nosotros no lo pondremos difícil", ha añadido, para matizar que serían "muy torpes" si se dedicaran a poner palos en las ruedas" de un gobierno de coalición. "No plantearemos ningún veto", ha matizado.
El líder de Podemos ha reconocido que los resultados de su partido en los comicios municipales, autonómicos y europeos han sido "malos" y que ahora "toca dar la cara y hacer autocrítica".
En un mensaje en su cuenta personal de Twitter, Iglesias ha enviado su primera reacción sobre los comicios, después de guardar silencio durante la noche electoral. Asimismo, ha reconocido en el mismo tuit que pondrán "toda su fuerza" para hacer gobiernos que defiendan la "justicia social y los derechos sociales".
Podemos ha acentuado este domingo su declive en las elecciones europeas, autonómicas y municipales, en las que ha perdido parcelas importantes de poder autonómico y municipal y en las que, además, se ha dado un batacazo en el Parlamento europeo, donde concurría en coalición con Izquierda Unida.
Lejos de mejorar sus resultados de las generales de hace un mes, donde ya cayó de la tercera a la cuarta plaza --por detrás de Ciudadanos-- en esta 'segunda vuelta' la formación morada ha llegado incluso a desaparecer en dos de las 12 comunidades autónomas que han celebrado este domingo elecciones: Cantabria, donde hace cuatro años cosechó tres escaños, y Castilla-La Mancha, donde sumó dos diputados.