CASTELLÓ (EP). La Fiscalía mantiene el control y la supervisión de las residencias de la Comunitat Valenciana ante el repunte de casos por covid-19 y, por el momento, tiene abiertas tres investigaciones, dos de ellas en centros de la provincia de Alicante y una más en la de Valencia.
Desde Fiscalía General del Estado (FGE), al contrario de lo que ocurría antes del verano, ya no se pide a las fiscalías de las comunidades autónomas los datos recabados en residencias. Sin embargo, según ha explicado en declaraciones a Europa Press la coordinadora de la sección Civil de Valencia, Ana Lanuza, desde su departamento van a seguir trabajando con los centros para proteger y ayudar a este colectivo tan vulnerable.
Y hay una variación. Mientras que antes se abrían diligencias de investigación civil -no penal- cuando el centro superaba los 10 fallecidos, en la actualidad se ha decidido modificar este criterio para adaptarse a la nueva realidad.
Ana Lanuza ha explicado que ahora existe un elevado número de contagios en residencias pero la mortalidad ha disminuido frente a los datos de meses anteriores, con lo que desde Fiscalía se abrirán diligencias en base a otras circunstancias como el ratio de afectados.
La fiscal ha comentado que desde su departamento se sigue en contacto telefónico con los responsables de las residencias de la autonomía para recabar los datos correspondientes e iniciar las actuaciones que se estimen oportuno. Así mismo, desde la Conselleria de Sanidad se colabora diariamente.
Ana Lanuza ha indicado que hay más medios para hacer frente a esta pandemia y tal vez por este motivo hay menos mortalidad. Aún así, ha pedido no bajar la guardia ante este colectivo.
En este contexto, ha valorado las medidas de prevención que se pusieron en marcha antes de verano en las residencias como la realización de pruebas y aislamientos en los casos necesarios.
La fiscal, quien ha recordado que el número de fallecimientos registrados en estos centros antes del periodo estival ascendía a 565 desde que se originó la pandemia, se ha mostrado cauta y esperanzada en que la situación en los centros de mayores no empeore. "Pero tenemos que estar preparados para cualquier situación. No sabemos cómo va evolucionar el virus en invierno", ha apostillado.
