VILA-REAL. La Unidad de Mediación Policial recibió en 2019 más de 300 solicitudes para la resolución de conflictos de convivencia a través de esta metodología de la que es pionera la Policía Local de Vila-real, alcanzando cerca de un 80% de resolución positiva, según ha informado el Ayuntamiento de Vila-real a través de un comunicado. La concejala de Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez, ha presentado este martes la estadística y la memoria de la Unidad de Mediación Policial correspondientes a 2019, junto a la responsable del servicio, la inspectora Rosana Gallardo, y el comisario principal jefe de la Policía Local de Vila-real, José Ramón Nieto.
“La mediación policial ha demostrado ser un método ágil y eficaz para solucionar aquellas situaciones de conflicto que pueden surgir en la convivencia diaria de los vecinos, sin necesidad de llegar a la vía judicial”, ha destacado la concejala de Seguridad Ciudadana. El balance de la Unidad de Mediación Policial se traduce en un total de 304 solicitudes de intervención recibidas en 2019, lo que supone un ligero repunte respecto a años anteriores, en los que la media de peticiones anuales rondaba las 280 anuales. “Creemos que esto se debe a que la ciudadanía va conociendo el servicio y confiando en la Policía Local”, ha explicado la inspectora Rosana Gallardo.
La mayoría de los asuntos (el 87%) corresponden a los ámbitos comunitario y rural. En este sentido, Gallardo ha detallado que en el ámbito comunitario se han tratado temas como alquileres, estafas, peñas, ocupaciones de inmuebles, insalubridad, animales, ruidos, amenazas, filtraciones agua, entre otros, mientras que en el ámbito rural se han abordado cuestiones como lindes, vegetación, vertidos, daños en propiedades, limpieza de fincas, animales, riegos…
La responsable de la Unidad de Mediación Policial ha destacado el grado de resolución positiva, es decir, con un acuerdo, que se sitúa en un 79% de media y además ha significado que tras medir el índice de satisfacción de los usuarios se constata que un 96% están satisfechos o muy satisfechos con el servicio de mediación policial. “Hay que decir que la baja satisfacción, la mayoría de las veces no se corresponde con la falta de acuerdo, sino con que algunos usuarios desearían que la Policía Local diera la solución a su controversia, pero precisamente el objetivo de la mediación policial es que sean las personas implicadas quienes decidan su solución”, remarca la inspectora.
Por otro lado, derivados de la vía judicial se han recibido 6 asuntos, de los cuales 1 se ha resuelto con acuerdo, y en el resto de casos no se ha iniciado la mediación ante la negativa de las personas involucradas, teniendo que ver con daños en propiedades, amenazas e insultos. En menores se ha actuado en dos casos uno de los cuales se ha resuelto con acuerdo. En cuanto al servicio de atención a las víctimas graves de accidentes (Servigrac), que se realiza por parte de los mediadores policiales, se han tramitado 304 atenciones.
El comisario principal jefe de la Policía Local, José Ramón Nieto, ha hecho balance de la formación que la Policial Local de Vila-real, referente en mediación, ha realizado durante este año pasado. En total, 252 policías de diferentes comunidades autónomas han pasado por la Escuela de Formación de la Policía Local (Efopol) para recibir formación en materia de mediación a través del convenio entre el Ayuntamiento de Vila-real, la Universitat Jaume I y el Instituto Valenciano de Seguridad Pública (Ivaspe).
Nieto ha señalado la consolidación de la metodología de mediación que desarrollan los agentes locales de Vila-real, un modelo que se exporta también a nivel autonómico, nacional e incluso internacional. “Tenemos mucha demanda en materia de formación para la mediación y la prueba es que por la Efopol han pasado agentes tanto de la Comunidad Valenciana como de Murcia, Cataluña, Madrid, Andalucía, Aragón o País Vasco, entre otras comunidades”, ha concluido el responsable policial. A nivel internacional, durante 2019 se han realizado colaboraciones con instituciones de otros países como Estonia, México y Colombia.
