VILA-REAL.El episodio de preemergencia por fuertes lluvias decretado por la Generalitat para este miércoles se ha saldado, por el momento, sin incidencias remarcables. El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha comprobado, acompañado por el comisario principal jefe de la Policía Local de Vila-real, José Ramón Nieto, los puntos inundables más conflictivos de la ciudad, que esta mañana no ha sido necesario cortar al tráfico a excepción del túnel de la calle Furs de Valencia, que ha permanecido cortado aproximadamente dos horas por precaución, si bien las tres bombas del paso han funcionado con normalidad y han absorbido el agua sin mayores problemas.
Según ha informado el consistorio de la ciudad, los 20 litros registrados en una hora en las estaciones meteorológicas de Vila-real no han causado problemas remarcables, con la salvedad de la caída de un árbol en la plaza del Alguer, sin provocar daños materiales.
“El personal de Policía Local y Servicios Públicos han estado toda la noche y la mañana atentos a la evolución del episodio, comprobando caminos, barrancos y calles donde suelen producirse mayores problemas con las lluvias, que, afortunadamente, no se han producido. Podemos decir, pues, que el protocolo ha funcionado con normalidad, aunque seguimos activos y alerta, ya que la Generalitat ha reactivado esta tarde la alerta naranja en la provincia”, valora Benlloch, quien destaca la colocación, por primera vez, de semáforos móviles en las dos entradas del túnel de la carretera de Burriana para reforzar la seguridad y evitar el paso de vehículos aun estando cortado a la circulación
El alcalde se ha referido también al servicio pionero de ludoteca habilitado por primera vez por el consistorio, para facilitar la conciliación de las familias que no tuvieran otra opción para dejar a sus hijos e hijas tras la suspensión de clases decretada para este miércoles. La ludoteca, abierta en horario lectivo ampliado –de 7.30 a 13.00 horas- en la Agencia de lectura María de Luna, ha atendido a lo largo de la mañana a una quincena de menores, con profesionales especializados, juegos y dibujos.
“La seguridad de los menores es nuestra principal preocupación; por eso decidimos ayer decretar la suspensión de las clases, atendiendo a los datos que nos llegaban y a la posibilidad de que el episodio se fuese agravando. Pero también somos conscientes de las dificultades que muchas familias tienen de dejar a sus hijos cuando no hay colegio; por eso, por primera vez, hemos ofrecido este servicio de ludoteca, en una primera experiencia que se ha saldado con buenos resultados”, concluye el alcalde. El protocolo por la alerta naranja se mantiene activo.
