ALICANTE. Hércules y Villarreal B se suman al festival de empates en la cabeza del subgrupo 3B igualando a cero en una matinal fría de domingo en la que, eso sí, brindaron a los espectadores (todos ellos televisivos, pues el choque se disputó a puerta cerrada) un duelo entretenido, con ocasiones en ambas áreas (el Hércules estrelló dos balones en la madera).
Como en Los Arcos el Ibiza se dejó sus primeros dos puntos del curso en otro empate, todo seguirá igual en la parte alta de la clasificación, con los celestes como líderes con 19 puntos, seguidos del Hércules y el Orihuela con 12 y el Villarreal B con 10.
Con Appin con Sergio Moyita en la sala de máquinas, Jesús Alfaro, David Sánchez y Borja Martínez en la segunda línea y Sergio Buenacasa en punta, es decir, el mismo once con el que encaró la cita en Ibiza pero esta vez con las novedades en el banquillo de Pedro Sánchez y Acuña, encaraba el Hércules un choque muy entretenido, de dominio alterno y alternativas en ambas áreas.
Un remate fallido de Buenacasa a pase de la muerte de Jesús Alfaro en los primeros compases del choque; un mano a mano del extremo palmerino que a la salida de un saque de esquina botado por el Villarreal le comía la tostada a Maxi Villa pero le ganaba la partida Marc Vicente, el meta visitante; y un balón estrellado en la madera por Tano, en una falta provocada y botada por Moyita fueron las ocasiones más claras antes del descanso del Hércules, que ante un equipo cuyo fútbol gira alrededor del balón fue por momentos mejor en la batalla del centro del campo (con Appin muy activo en la recuperación e incluso distribución de balones), además de lograr abrir el campo y llevar peligro por ambas bandas (especialmente por la derecha con Javi Pérez y el citado Alfaro).
Eso sí, el Villarreal B de Miguel Álvarez tampoco se quedó atrás en lo que a ocasiones se refiere y es que, si bien no las tuvo tan claras, sí se acercó al gol en disparos desde la frontal de Víctor Narro y Juan Antonio Ros desde la frontal y, especialmente, un mano a mano de Álex Millán con Falcón en el que el meta gaditano del Hércules se mostró mucho más despierto y una falta lateral botada por Agüero y bien resuelta en el segundo palo por Appin.
Vuelve Acuña
Tras el paso por vestuarios, en el primer tramo del segundo acto, el filial amarillo sí se hizo con el monopolio de la posesión, aunque el Hércules tampoco llegó a sentirse incómodo con esa situación e incluso pisar con más peligro que el Villarreal B el área rival, como otra buena asociación en banda derecha de Jesús Alfaro con Javi Pérez que en el segundo palo no llegaba a rematar Buenacasa. Precisamente, el delantero maño iba a ser el primer futbolista sustituido por Cubillo, quien en el minuto 62 daba entrada a Acuña que pasó a ser el destinatario de todos los balones de peligro de los blanquiazules.
Otro balón al palo del Hércules
Un remate acrobático de Moisés García en una falta, un saque de esquina que Acuña y Pedro Torres (que entraba por David Sánchez a diez minutos para el final), por muy poco, no convertían en gol en el segundo palo y un balón que estrellaba en el travesaño Borja Martínez en una falta desde la frontal fueron las acciones más claras de los hombres de Cubillo en una segunda mitad, en la que el Villarreal, por su parte, tuvo en sendos disparos lejanos de Trasende y sobre todo de Álex Millán (tras un caño antológico a Tano) sus mejores ocasiones.
0 - Hércules CF: Ismael Falcón, Nani, Moisés García, Sergio Buenacasa (Acuña, min. 62), Moyita, Borja Martínez (Manny Rodríguez, min. 90), Jesús Alfaro, David Sánchez (Pedro Torres, min. 79), Tano, Javi Pérez y Kévin Appin.
0 - Villarreal CF: Marc Vicente, Maxi Villa, Daniel Trasende, Copete, Adrián de la Fuente, Víctor Narro (Haissem Hassam, min. 77), Juan Agüero, Carlos Adriano, Álex Millán, Juan Antonio Ros y Ahn (Kévin Soni, min. 61).
Arbitraje: el veratense Pablo Morales Moreno mostró amarillas a Javi Pérez y Moisés García por el Hércules y a Juan Agüero por el Villarreal B.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada séptima en el grupo 3B de Segunda B disputado a puerta cerrada en el estadio José Rico Pérez de Alicante en una mañana fría y marcada por el viento.