CASTELLÓ. (EP). Las comercializadoras de electricidad deberán incluir en sus facturas desde hoy, 31 de agosto, un código QR que permitirá a los clientes acceder al comparador de ofertas de luz y gas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
La entrada en vigor del código QR se produce en un momento en el que el precio mayorista de la luz no deja de batir récords, y mañana miércoles marcará un nuevo precio máximo, de 132,47 euros el megavatio hora (MWh), lo que supone encadenar por tercer día consecutivo el precio más alto de la serie histórica.
La resolución de la CNMC establece que el código deberá incluir los datos del consumidor (código postal, potencia contratada, consumo por periodos horarios de cada peaje de transporte y distribución en el último año) necesarios para poder valorar el importe anual de la facturación que resultaría de contratar las ofertas disponibles en el comparador.
También deberá incluir las posibles penalizaciones en caso de que las hubiera por cancelación anticipada del contrato; parámetros como el consumo en el periodo de facturación, el importe total de la factura, de los servicios adicionales, de excedentes de autoconsumo y del resto de conceptos y otros datos sobre los CUPS, la comercializadora y la potencia máxima demandada.
El código QR estará disponible en la factura de los consumidores con una potencia contratada inferior a 15 kilowatios. Los clientes podrán acceder al comparador de ofertas de gas y electricidad de la CNMC sin necesidad de incorporar ningún otro dato. De esta forma, podrán comparar sus consumos con el resto de las ofertas disponibles en el mercado y decidir cuál se adapta mejor a su perfil.
El objetivo de la CNMC es facilitar al pequeño consumidor el acceso a esta información en un momento en el que existen hasta 6 periodos de consumo desde la entrada en vigor, el pasado 1 de junio, de la nueva estructura de peajes que, según las estimaciones de la CNMC, abaratará como mínimo en torno a un 3,4% el recibo de los 19 millones de consumidores domésticos acogidos a la tarifa regulada (PVPC) sin discriminación horaria.