VALÈNCIA. (EFE).- Las mascarillas se han convertido en un aliado obligado en la lucha contra el coronavirus y los clubes de fútbol han sabido ver en ello una oportunidad con el diseño customizado de estas prendas para que los aficionados puedan caminar protegidos por la calle y al mismo tiempo presumir de sus colores.
Así podrán hacerlo desde ya los aficionados del Barcelona después de que la entidad haya anunciado el lanzamiento de tres modelos diferentes de diseño exclusivo que ya pueden comprarse en la Barça Store de Paseo de Gracia, a través del e-commerce de la Barça Store del Camp Nou y próximamente en el resto en butiques oficiales de explotación directa por parte del club a medida que abran.
La misma es reutilizable de uso diario, y su protección contra la transmisión de la enfermedad está garantizada hasta 40 lavados, con un uso máximo recomendado por el fabricante de 8 horas después de cada lavado. En este caso habrá tallas para niños de 3 a 6 años, de 7 a 12 y de adultos.
De esta manera la entidad azulgrana se suma a una corriente en auge en la que también está por ejemplo la Real Sociedad, donde ha habido lista de espera para poder hacerse con algún ejemplar, o el Huesca entre otros.
No serán los únicos ya que otros tienen planeados lanzarlas al mercado. Es el caso del Atlético de Madrid, quien pondrá a disposición de sus aficionados varios modelos, o de un Deportivo de La Coruña que las tiene en proceso de producción y las sacará por un precio entre los cinco y los siete euros.
En el caso de otro conjunto gallego, el Celta de Vigo, una colaboración entre su fundación y la Xunta de Galicia ha permitido el reparto de 11.000 unidades con el escudo del equipo entre los niños. Además hay casos solidarios como las que vende el Circuit Ricardo Tormo a través de su tienda online, viéndose beneficiada Cáritas.
Así pues la demanda de unas mascarillas que se alejen de las tradicionales y tengan un toque personal va en aumento tal como indica Álvaro Cebrián, cofundador de El Ganso, a EFE: "La diferencia es en los colores y el diseño pero lo importante es que cumpla la normativa higiénica en el tejido, en el filtro y en todas las propiedades de los materiales".
"La mascarilla es una prenda más que desgraciadamente vamos a tener que llevar unos meses mínimo. Aporta valor igual que lo aporta el comprarse unos guantes para protegerte. Es un negocio desde el momento que aporta valor añadido", añade.
En cuanto a la elaboración de las que ellos comercian, comenta: "Partimos de telas quirúrgicas pero con un color especial y las bordamos antes de confeccionarlas. Lo que cambia es la tela y luego que añadimos nuestro logo, una boca y una nariz".
Más allá de España, esta tendencia también está cobrando fuerza. Por ejemplo la NBA distribuyó unas que representaban a cada franquicia de la competición americana de baloncesto y cuya recaudación se destinó a ONG's del país.
Mientras en Alemania, país donde ya rueda del balón, el Bayern Múnich vendió más de 100.000 en 24 horas hechas con bufandas que el club pensaba repartir en el estadio Allianz Arena en el partido de vuelta de la Liga de Campeones contra el Chelsea con motivo de los 120 años de la fundación del club. Un éxito que ayudó a la iniciativa 'WeKickCorona' impulsada por Joshua Kimmich y Leon Goretzka.