spanish Brass y ramon cardo interpretan folclore valenciano i a la gossa sorda

Las tierras recorridas durante siglos por la música valenciana

20/08/2019 - 

VALÈNCIA. Spanish Brass vuelve esta noche a darle la vuelta a la música. Esta vez lo hará en Sagunt a Escena y con un nuevo espectáculo, Mira si hem recorregut terres. Un viaje por la música valenciana a través del tiempo con un eje común: su adaptación al formato del quinteto de vientos de metal acompañados por la voz y la guitarra de Carles Dènia. La banda, que este 2019 cumple 30 años sobre los escenarios, se atreve a poner en el mismo programa música original de la época de la Corona de Aragón con canciones contemporáneas, todo bajo los arreglos de Ramón Cardo. "El perfil de la música que ofreceremos tiene un tinte jazzístico que se ajusta a la personalidad de los instrumentos de metal. La propuesta se confió al compositor, instrumentista y profesor, pero sobre todo amigo, Ramón Cardo. Él entendió qué camino queríamos tomar con el espectáculo, y nos sedujo con la idea de tamizar y destilar toda esa música popular de épocas pasadas en un mismo lenguaje musical, el Jazz. Es como una envoltura perfecta para ofrecer desde un punto de vista diferente, la riqueza de la cultura popular de nuestra tierra", comenta el grupo para Culturplaza.

En efecto, la adaptación no ha sido únicamente la de unir los temas contemporáneos con los más antiguos, sino que todos han pasado por la mirada del jazz: "Hay que poner en valor el trabajo excelente de Cardo, inspirarse en melodías arcaicas y sencillas para después dotarlas de la profundidad harmónica intrínseca al jazz para que llegue a los oídos como una creación novedosa y sofisticada". Con todo esto, este martes el Teatro Romano se llenará de la unión de tres mundos diferentes: la voz de Carles Dénia, los metales de Spanish Brass y los arreglos de Ramón Cardo. 

Los tres juntos asumen este camino común desde puntos diferentes pero con un objetivo común: poner en valor la música en valenciano a través de la Historia. "Fue simplemente una seducción reciproca a tres bandas entre los implicados. Tres elementos con vidas profesionales diferentes, con perfiles diferentes pero con el denominador común de amar la música bien hecha. Creímos desde el principio que podría ser una buena excusa para juntar e impulsar talentos y sensibilidades", explican desde Spanish Brass.

Sobre el escenario del Teatro Romano sonarán canciones heredadas de los moriscos, temas inspirados en letras de Ausiàs March, canciones de origen popular y tabernarias, que nacieron en las colonias españolas en Cuba, letras que han querido ser signos de los momentos de represión recientes y que abrían una puerta de escape para descomprimir libertades. Todo bajo el paraguas de la música en valenciano, algo que desde el quinteto valoran como "una convivencia étnico-musical, envidiable y ejemplar si echamos un vistazo al mundo actual de desprecio y puertas cerradas".

Recorrer el presente, recordar el pasado

- En esta tarea de recuperar para el público actual canciones de siglos pasados, ¿cuán conectados tenéis que estar con el pasado y cuánto con el presente?
- En nuestro caso, como músicos de formación clásica, el pasado el presente y el futuro en música han de estar muy presente. Hemos dedicado años al estudio de las estéticas del arte en diferentes épocas, hemos hecho un periplo de escucha musical profunda a lo largo de muchos años para entender cómo se interpretaban esas músicas y en qué contextos, para dotarnos de elementos de juicio y poder verter en la interpretación, nuestras propias conclusiones. Cuando nos ponemos a tocar las canciones de este proyecto, hay giros musicales y de texto que emocionan, y nos sentimos bien solo al pensar que el origen de todo ello está justo debajo de nuestros pies. Nuestra tierra, nuestra Música, nuestra lengua…

Esos giros musicales y ese ver qué hay debajo de nuestros pies es la gran motivación del quinteto en el espectáculo de esta noche en Sagunt a Escena. Mira si hem recorregut terres se refiere al primer verso de Malaguenya de Barxeta, pero también es una declaración de intenciones: es una fotografía de todo el camino recorrido como cultura singular, también los kilómetros hechos por el quinteto en sus treinta años de carrera, que además se juntan con las otras tierras reocrridas por Ramón Cardo y Carles Dénia, y es un autorretrato que intenta impulsar desde la raíz: "ante todo, queremos interpretar, cuidar e impulsar lo que somos".

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