MADRID. El presidente de la patronal de concesionarios Faconauto, Gerardo Pérez, ha pedido este viernes "tranquilidad y certidumbre" para que el sector de la automoción repita este año los datos de 2018.
De ese total, 6.873 millones de euros correspondieron al IVA que generan los concesionarios, 513 millones al impuesto de matriculación y alrededor de 1.300 millones a las cotizaciones a la Seguridad Social de los empleados del sector, ha detallado el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, durante la presentación del Libro Blanco de la distribución oficial, elaborado en colaboración con la consultora MSI.
Esta primera edición del informe, que se conocerá más en profundidad en el XXVIII "Congreso & Expo de Faconauto" de los días 11 y 12 de febrero, pretende ofrecer una "radiografía" de las cifras que representa la distribución y reparación de vehículos para la economía nacional.
El Libro Blanco de la distribución oficial "clarifica" la dimensión y el peso del sector de los concesionarios, ha destacado la patronal, que también ha hecho hincapié en la "relevante cifra" de los 8.686 millones de euros de aportación a las arcas públicas tanto en tributaciones directas como indirectas.
"El Libro Blanco nos da algo que intuíamos pero no éramos conscientes: somos unos grandes recaudadores de impuestos", ha afirmado Pérez, quien también ha hecho hincapié en que el sector genera "mucho movimiento y es muy importante para la economía nacional".
Según Pérez, estos datos también muestran que el automóvil está "suficientemente gravado" y que no deberían aceptar más tasas; al tiempo que ha animado a los concesionarios a seguir creciendo y creando "empleo de calidad".
La vicepresidenta ejecutiva de Faconauto, Marta Blázquez, ha explicado que en los seis capítulos del Libro Blanco se aporta un análisis de la distribución de vehículos en España, así como del reglamento al que está sujeto el sector y su incidencia.
También se detalla la demanda total del sector frente a las redes oficiales, se explica cómo es su gestión, se debate sobre el "juego" de la nueva automoción y se aporta una previsión de mercado para 2025 (este último, un capítulo donde hay mensajes más "alentadores" y otros "preocupantes", ha señalado Blázquez).
Certidumbre y tranquilidad
El presidente de la patronal ha pedido este viernes "tranquilidad y certidumbre" para que el sector de la automoción repita este año los datos de 2018.
En 2019, "si todo va bien, el mercado va a ser plano y deberíamos repetir los numeros de 2018", ha pronosticado Pérez durante la presentación del Libro Blanco de la distribución oficial elaborado en colaboración con la consultora MSI.
El año pasado se vendieron en España 1.321.438 de turismos nuevos y todoterrenos, el 7% más que un año antes.
En su opinión, para que esto ocurra el sector de la distribución necesita "tranquilidad, certidumbre", un Gobierno que proponga medidas, una mejora medioambiental "potente" -pero que tenga en cuenta las limitaciones del parque de vehículos- y la posibilidad de que los ciudadanos puedan elegir entre diferentes tipos de propulsión.
La asociación cree que este año el comportamiento del sector va a depender de los retos particulares y de los relacionados con la situación de la economía global y sus repercusiones en el mercado español.
Pérez ha considerado que la política fiscal y normativa de los próximos años van a afectar de forma "determinante" al automóvil, un sector en el que ya existen "síntomas de desaceleración".
La incertidumbre política y las tensiones territoriales puede hacer que la economía de síntomas de inestabilidad, ha señalado también.
Para Faconauto, 2018 ha sido un "buen año" que ha dejado un "sabor agridulce", porque podría haber sido "muy bueno".
La diferencia, en opinión de Pérez, ha sido que desde agosto se ha generado un "ruido ambiental que no ha sido positivo para el automóvil y que ha generado incertidumbre", lo que ha hecho perder una "gran oportunidad para tener un mercado mucho más robusto".
Tampoco ha habido un plan de incentivos, ha recordado.
Por eso, el presidente de la patronal cree que es necesario que "el ruido negativo cese", ya que "el automóvil es alérgico a la incertidumbre".
Para solucionar el problema medioambiental, Faconauto propone el achatarramiento del parque antiguo con una transición "ordenada y justa"; un plan de incentivos para la adquisición de vehículos de todas las propulsiones y para la instalación de infraestructura de recarga; y una política fiscal basada en el uso.
"Al ciudadano, antes de prohibirle hay que proponerle alternativas", ha subrayado Pérez.